Jueza de Santiago dice sentía vergüenza ajena por todos los escándalos

Jueza de Santiago dice sentía vergüenza ajena por todos los escándalos

Jueza de Santiago dice sentía vergüenza ajena por todos los escándalos

SANTIAGO.- Los jueces hablan por sentencias. Es una máxima que se aplica en la conducta de este tipo de profesionales. Sus dictámenes en cada proceso judicial son sus mejores referencias. La sociedad lo juzga por sus hechos.

“Tengo muchos años en el sistema judicial y realmente con todos los escándalos sentía vergüenza ajena, desmoralizada como jueza. Conozco compañeros y compañeras que tienen años y hacen un trabajo digno y se esfuerzan por hacer una labor transparente, idónea con sacrificio y esfuerzos, pero al ver que dos o tres jueces con conducta inadecuada me sentía avergonzada”.

Así, con su voz pausada, con carácter, pero visiblemente emocionada, la jueza Rosemary Veras, accedió a responder algunas preguntas de reporteros de Caribbean Digital, luego que el Ministerio de Administración Pública (MAP) la reconociera con la Medalla al Mérito, por sus años en servicio y con una serie de elementos como el desempeño honrado y transparente en sus funciones. Otros 102 servidores públicos también fueron homenajeados.

La magistrada es actualmente jueza del Tribunal Superior de Tierra del Departamento Norte. Fue presidenta de la Cámara Civil y Comercial del Distrito Judicial de Santiago, juez de paz y laboró previamente en el Ministerio Público.

Con 33 años de ejercicio profesional, 29 de ellos como juez, casada y con tres hijos ya mayores de edad, Rosemary Veras siente una gran satisfacción por el homenaje a su carrera, cuando el sistema judicial dominicano ha estado en el ojo del huracán, por la presuntas irregularidades de algunos jueces en su labor cotidiana.

“Haberme elegido y reconocido en esta circunstancias me llena de gran satisfacción. Tengo muchos años y puedo andar libre y tranquila y segura que doy lo mejor de mí y los jueces que me relaciono son personas honestas y responsables, con un servicio intachable”, afirma con voz de satisfacción.

Y agrega que un 5, un 10 por ciento de las personas con conductas inadecuadas se nota mucho, pero esa conducta, advierte, oscurece la gestión seria, responsable y transparente del 90 por ciento de los demás jueces.

La jueza dice que el descrédito es injustificado en la justicia. “No hay crisis porque las personas que supuestamente han sido señaladas fueron sometidas a la justicia”.