SANTo DOMINGO.- El exprocurador Jean Alain Rodríguez y otros tres de los imputados en la Operación Medusa han sido enviados por 18 meses como medida cautelar al Centro Correccional y de Rehabilitación Najayo Hombres.

La coerción está contenida en la resolución de la jueza de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, Kenya Romero, leída ayer en la sala de audiencias a las 3:00 de la tarde. El caso fue declarado complejo.

Los otros enviados al referido centro correccional junto al exprocurador Rodríguez son Jonathan Joel Rodríguez, Javier Forteza Ibarra y Alfredo Solano Augusto, por entender que poseen las facilidades de sustraer pruebas durante el desarrollo del proceso.

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Asimismo, la jueza impuso arresto domiciliario e impedimento de salida a los imputados Altagracia Guillén, Jenny Marte Peña y Rafael Antonio Mercedes. Mientras que impuso una garantía económica de un millón de pesos, impedimento de salida y presentación periódica al encartado Miguel José Moya.

La magistrada justificó su decisión en relación con los cuatro últimos por entender que no representan un riesgo para la investigación del Ministerio Público.

El grupo está acusado de asociarse para cometer estafa, prevaricación, coalición de funcionarios, delito de alta tecnología, sabotaje, soborno, lavado de activos y otras infracciones graves por unos RD$6 mil millones de pesos.

La jueza Romero designó el Cuarto Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional para llevar el control de la revisión obligatoria de la medida de coerción, que debe empezar el 13 de octubre.

La directora de Persecución, Yeni Berenice Reynoso, dijo que el Ministerio Público valora la decisión del tribunal y entiende que la motivación de la magistrada está sustentada en pruebas que fueron acreditadas.

Agrego que con relación a los que no les impuso prisión, fue por entender que no existen los riesgos procesales y el riesgo de peligro de fuga, pero ningún caso es por insuficiencia de pruebas.

El compromiso del Ministerio Público, dijo Reynoso, es el de presentar casos bien fundamentados, un hecho que según palabras le ha sido demostrado a la sociedad.

“Hace formal compromiso, de seguir trabajando estos temas, que no dejan de ser desafiantes, que mucha veces lleva al equipo a trabajar hasta 18 horas”, dijo la procuradora adjunta a la salida del tribunal tras asegurar que el Ministerio Público someterá a otras personas implicadas en el este expediente.

“Esta es una investigación abierta, el Ministerio Público procesará a más personas sobre este caso”, indicó Reynoso.

Taciturno y cabizbajo

Luego que los encartados del caso “Medusa” escucharon la decisión de la jueza Romero fueron sacados del tribunal por agentes de la Unidad de Traslado de Alto Riesgo. A los imputados, entre ellos el ex procurador Jean Alain Rodríguez, se les observó cabizbajos, con mirada triste y ojos visiblemente enrojecidos.

El lunes, cuando el exprocurador habló ante el tribunal, pidió a la jueza Romero la medida menos gravosa, mediante libertad para estar en su casa junto a su esposa e hijos. En ese momento, el exfuncionario se calificó como un hombre honesto.

Operativos

El pasado 29 de junio los procuradores adjuntos Yeni Berenice Reynoso y Wilson Camacho empezaron la ejecución de la Operación Medusa con 38 allanamientos y apresamiento de los imputados. Esta prófugo Rafael Cano, contra quien existe orden de arresto.

Abogado exprocurador apelará decisión jueza

Reacción. El abogado del exprocurador Jean Alain Rodríguez, Gustavo Biaggi, dijo que apelarán la decisión que envía a prisión por 18 meses a su representado, y que lo harán desde que emitan y les notifiquen la resolución integra de la magistrada Romero. “Desde que se emita y se notifique la decisión in extenso, es el deseo de Jean Alain Rodríguez Sánchez apelar esta aberración”, dijo.

La defensa de Miguel José Moya, José Martínez Hoepelman, aseguró que siendo un proceso llevado por Yeni Berenice Reynoso, no es tan sólido, porque solo a cuatro imputados les dictan prisión.

— Acusación
El Ministerio Público demostró la solidez de su acusación en estrado, donde expuso el contenido del expediente, con más de 5,800 páginas de pruebas, y desmontó cada alegato de la defensa.