Irak: Suben a 59 los muertos en ataque reivindicado por EI

Irak: Suben a 59 los muertos en ataque reivindicado por EI

Irak: Suben a 59 los muertos en ataque reivindicado por EI

Restos de varios vehículos calcinados en un concesionario de coches usados tras la explosión de un artefacto en el barrio de Al Bayaa, en Bagdad (Irak) hoy, 17 de febrero de 2017. Según varias informaciones, al menos 52 personas han muerto y otras 42 resultaron heridas en el atentado reivindicado por Estado Islámico. EFE/Ali Abbas

BAGDAD.— La cifra de muertos por un coche bomba en el sur de Bagdad alcanzó el viernes las 59 personas, y otras 66 personas resultaron heridas, indicaron un agente de policía y fuentes médicas.

Las autoridades habían informado en un principio de al menos 55 muertos y más de 60 heridos en el ataque del jueves contra una empresa que vendía automóviles en el barrio de Al-Bayaa.

El grupo extremista reclamó la autoría del ataque. La milicia radical dijo el viernes en un comunicado que sus combatientes habían detonado bombas en un automóvil estacionado junto a una congregación de chiíes en la zona. El grupo armado no dio más detalles.

El grupo extremista comete ataques casi diarios en Bagdad pese a sufrir reveses militares en otros puntos del país, como la ciudad norteña de Mosul, donde fuerzas iraquíes respaldadas por el grupo EI libran una gran ofensiva desde octubre.

Las fuentes hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizadas a informar a la prensa.

El Departamento de Estado de Estados Unidos condenó el ataque, indicando que ataques como ése demuestran el “descarado desprecio por la vida humana” del grupo extremista y “sus esfuerzos por sembrar discordia y división en el pueblo iraquí”.

Otras ocho personas murieron y unas 30 sufrieron heridas en cuatro ataques en Bagdad y alrededores, según policía y fuentes médicas.

Hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizadas a informar a la prensa. Se cree que los ataques casi diarios en Bagdad reivindicados por el grupo EI son un intento de distracción del terreno que pierden los milicianos en sus frentes en el norte y el oeste de Irak.