Santo Domingo.- Tras analizar el impacto de cambio climático sobre la agricultura dominicana, específicamente a nivel regional, se pudo determinar que tanto las sequías como las inundaciones figuran como las principales amenazas del sector agrícola en República Dominicana.
Esta información es el resultado de un análisis regional del efecto económico del cambio climático en la agricultura dominicana de los principales productos nacionales desde 1981 al 2014, realizado por Yelidá Blanco y Melissa Salvador, en el marco de su tesis de grado en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
El estudio fue realizado en todo el territorio nacional fraccionado según la división administrativa del Ministerio de Agricultura en 8 regiones climáticas: Central, Este, Norte, Norcentral, Nordeste, Noroeste, Sur y Suroeste.
Según el análisis si existe un efecto significativo de la precipitación anual, temperatura mínima y sequía sobre los rendimientos en agricultura.
Detalla que las tormentas y las inundaciones ha tenido un mayor impacto humano y económico, con pérdidas de 0,83% del PIB entre 1997-2006, los cultivos de subsistencia son los mas vulnerables a las variaciones del clima debido a que se desarrollan mayormente en terrenos carentes de sistemas de riego, y dependen de las estaciones de lluvias.
El estudio explica que «las fluctuaciones en las variables del clima si afectan no solo el rendimiento de los principales cultivos de la agricultura sino también el Producto Interno Bruto (PIB) dominicano».
Las investigadoras citan el informe presentado en 1998 por el Banco Central de la República Dominicana que describe los daños que producen estos fenómenos al sector.
«El descalabro del sector en 1990 se debió a la profunda crisis que afectó durante ese año. La caída en 1994 del PIB se debió a los efectos de fenómenos climatológicos de importancia, como la sequía y el paso de tormentas tropicales Derby y Gordon. Para el 1997, se produjo una reducción en un -4% de la tasa de crecimiento del subsector agrícola, como consecuencia de los efectos negativos de la sequía y otros fenómenos atmosféricos, así como la aparición de plagas».
La entidad refirió que en el 2014, cuando la agricultura creció un 4.9% debido al desempeño positivo en la caña de azúcar (4.5%) y otros cultivos agrícolas (6.4%).
Con relación al 2013, el subsector mostró una caída -0.53%, como consecuencia de la sequía que afectó gravemente la producción de arroz.
Mientras que las tormentas Noel y Olga tuvieron un impacto negativo en el desempeño económico dominicano, ya que las pérdidas causadas ascendieron a más de RD$14, 500 millones (equivalentes a 1.3% del PIB), siendo el sector primario el más afectado, el cual sufrió pérdidas de más de RD$ 5,500 millones.
Finalmente explican que será determinante para el sector agrícola la presencia o ausencia de políticas públicas efectivas para la mitigación y adaptación del cambio climático incrementa el grado de vulnerabilidad que presenta el país ante los cambios climáticos.
.