La economía circular es un enfoque económico y ambiental que busca maximizar la utilización de los recursos y minimizar la generación de residuos y la degradación del medio ambiente.

A diferencia del modelo lineal tradicional de «extraer, producir, usar y desechar», la economía circular propone un ciclo continuo de reutilización, reciclaje y renovación de los materiales, manteniendo su valor y utilidad durante el mayor tiempo posible.

La economía circular, no es un concepto nuevo, ni se piense que solo es reciclaje. Es tan vieja como la pobreza y la falta de medios que obligaban al hombre a usar y reusar y reparar los bienes por falta de dinero o del mismo bien para su sustitución ante de los anos 1950, y sobre todo en los países de Sudamérica, África o la India.

El consumismo de Estados Unidos y Europa, a comienzo de la década de los 60, es que va imponiendo este sistema como nueva forma de vida, donde la gente comenzó a comprar cosas para sustituir la vieja, con más tecnología y también por moda, y en el peor de los casos, por obsolescencia programada.

Una manipulación mercadológica para inducir el consumo masivo de bienes por el mantenimiento del crecimiento económico para obtener beneficios por parte de los propietarios de los bienes de producción, a costa del sostenimiento medioambiental.

En la economía circular, se fomenta la reducción de la extracción de recursos naturales mediante la reutilización y la reparación de productos existentes. Se promueve el diseño de productos con componentes fácilmente desmontables y reciclables, lo que facilita su reintegración en el ciclo productivo. Asimismo, se fomenta el uso de energías renovables y la eficiencia energética para minimizar el impacto ambiental.

La circularidad implica estrategias y prácticas, como el reciclaje, la reparación, el modelo de la funcionalidad, conde se privilegia el acceso al servicio de un producto, maquinaria o utensilios etc. en lugar de la propiedad. La gestión adecuada de residuos sólidos y la cooperación entre diferentes sectores y actores económicos.

La economía circular tiene como objetivo principal la creación de sistemas más sostenibles, donde se reduzca la dependencia de los recursos finitos y se minimicen los impactos ambientales negativos. Además, busca promover la innovación, la creación de empleo y el desarrollo económico a largo plazo, al tiempo que se protege el medio ambiente y se mejora la calidad de vida de las personas.

Este concepto ha ganado importancia en los últimos años debido a la creciente preocupación por el agotamiento de recursos, el cambio climático y la generación de residuos. Muchos gobiernos, empresas y organizaciones han adoptado principios de economía circular como parte de sus estrategias de sostenibilidad y desarrollo sustentable.