Insectos sociales, los grandes polinizadores

Insectos sociales, los grandes polinizadores

Insectos sociales, los grandes polinizadores

En los nidos de los insectos sociales pueden vivir desde centenas hasta millones de individuos.

SANTO DOMINGO.-Por sus aportes, los insectos sociales, todos aquellos que comparten un sitio de alimentación, domicilio o que exhiben algún tipo de cuidado parental, son de gran incidencia para la humanidad.

Entre estos figuran las abejas, avispas y hormigas, polinizadores, y por lo tanto son fundamentales para la conservación de la flora y la seguridad alimentaria, pues ayudan a la producción de un sinnúmero de alimentos, como habichuelas, chinola y tomate.

Leandro Mattos Santos, docente investigador del Instituto Superior de Formación Docente Salomé Ureña (ISFODOSU), afirma que dentro de este tipo de insectos figuran las termitas (del orden de las Blattodea junto con las cucarachas), hormigas, avispas y abejas (Hymenoptera).

“Sin embargo, solo un pequeño número de avispas y abejas son sociales, es decir que tienen el más alto nivel de organización que la generalidad de los animales, y la mayoría de las especies son solitarias”, sostiene el biólogo con doctorado en Entomología.

Habitats
Estos insectos, según el investigador, dividen el mismo espacio o nido, cooperan entre sí, tienen capacidad de compartir el trabajo y presentan sobreposición de generaciones.

“Además, cuentan con castas morfológicas formadas por reinas involucradas en la reproducción y control social de las obreras que habitan el nido; estas se encargan de la búsqueda de alimento, cuidado de la prole, alimentación de la reina, limpieza y defensa del nido”, detalló Mattos.

Ese proceso lo hacen las obreras especializadas, llamadas soldados, que pueden presentar mandíbulas enormes como algunas especies de hormigas o los nasudos en las termitas con cabezas modificadas en una especie de pico que arrojan sustancias que impiden que invasores se adentren en el nido para atacar o usurpar la colonia.

En los himenópteros, un aspecto muy interesante es que las sociedades de insectos son matriarcales, o sea, las hembras son las que detienen el poder y realizan todas las funciones necesarias para la supervivencia de la colonia, en cambio los machos juegan un papel solo reproductivo, explica el catedrático.

Distribución
Según Mattos, los insectos sociales residen en casi todas las regiones del mundo, pero abundan en las zonas tropicales del planeta.

La mayoría de las especies hace vida en ambientes naturales, pero algunas están adaptadas a vivir en la ciudad e incluso en las casas.

Viven en nidos que son muy bien elaborados, poseen sistemas de ventilación de aire y galerías para el drenaje de agua y depósitos de basura, hasta que las obreras la saquen del nido. Son considerados los primeros ingenieros, arquitectos de la historia de la tierra.

“Además de esto, hace 15 millones de años atrás surgieron las primeras agricultoras del mundo, que son las hormigas cortaderas”, comenta el experto tras especificar que estas cortan pedazos de hojas de las plantas y llevan al interior del nido para nutrir hongos que cultivan para su alimentación.

En este cultivo están presentes bacterias y levaduras utilizadas también como antibióticos para cuidar de los individuos y prevenir la infestación de enfermedades en la colonia o hasta de una epidemia.

Aporte

— Nutren el suelo
En las regiones tropicales del mundo, las termitas y hormigas son los seres vivos más abundantes que existen. Otra función importante de estas es la degradación de materia vegetal que aporta nutrientes para las plantas en el suelo.