El gobierno filipino espera registrar la vacuna ante la Administración de Alimentos y Medicamentos del país (FDA, en inglés) para abril, indicó Roque.
SANTO DOMINGO.- Antes la Covid-19, los grandes laboratorios competían entre ellos en distintas ramas de la ciencia. Sin embargo, la pandemia ha provocado que estos grandes emporios se unan a la carrera de lograr una vacuna segura y eficaz para salvar las vidas de millones de personas.
Producir una vacuna, en promedio, tarda diez años. La que más pronto se ha sacado tardó nueve, explica Victoria Brenes, directora ejecutiva de la Federación Centroamericana de Laboratorios Farmacéuticos (Fedefarma).
Detalla que, de cada diez vacunas que se empiezan a investigar, sólo una logra el resultado. Dentro de Fedefarma, organización que agrupa 19 laboratorios del mundo, hay seis compañías, Janssen, AstraZeneca, Pfizer, GSK, MSD y Sanofi, que investigan vacunas para enfrentar la pandemia.
“Actualmente la industria se ha enfocado en apoyar a los gobiernos del mundo para buscar una pronta solución. Hasta el pasado viernes, había 24 vacunas candidatas que están en evaluación clínica, es decir, que están en pruebas con humanos. Y hay 142 en evaluación pre clínica (a nivel de laboratorios)”, narra Brenes.
Para producir una vacuna se deben agotar cuatro fases. Y antes de llegar a la última etapa este debe tenerse un alto porcentaje de seguridad.
Brenes indicó que todas las fases se están realizando de manera paralela, para acelerar y obtener una vacuna lo antes posible, “ya hay tres de las cuales dos están en fase tardía o empezando la fase tres que consiste en probarla en gran cantidad de personas sana y con cierto rango de edad” dice de manera optimista. Afirma que toda la industria está trabajando junta, se está compartiendo experiencia, para lograr que esto se logre, “se está trabajando los siete días a la semana las 24 horas al días, no se está escatimando los recursos para lograr obtener una vacuna y/o un tratamiento. A la fecha la industria está investigando 400 tratamientos”.
Rigurosidad científica
La Federación Latinoamericana de la Industria Farmacéutica (Fifarma) realizó ayer un encuentro con medios de comunicación de la región donde fueron abordados sobre la seguridad de la futura vacuna ante la prontitud con la que se está trabajando y manifestó que, aunque se estén realizando procesos paralelos, se está respetando toda la rigurosidad científica.
Sobre el mismo aspecto, el doctor Tousif Butt, vicepresidente de Aztrazeneca para Latinoamérica afirmó que “no estamos tomando atajos en término de seguridad.
—Ritmo acelerado
Cada uno de los laboratorios que están trabajando en la vacuna han afirmado que el hecho de tener un programa acelerado no compromete la rigurosidad, con seguimiento de las entidades regulatorias.