BARCELONA, ESPAÑA.-Miles de manifestantes independentistas catalanes volvieron a salir ayer a las calles de Barcelona, por cuarta noche consecutiva, en protesta por la condena a nueve de sus líderes por sedición, mientras el gobierno autonómico catalán insiste en convocar un nuevo referéndum ilegal de “autodeterminación”.
Mientras, las marchas que partieron de distintas ciudades de la región el martes con destino a Barcelona se desarrollaron en un ambiente de normalidad previo a la jornada de huelga general que se vivirá hoy, la cuarta en menos de dos años vinculada al proceso independentista.
Desde la sentencia del Tribunal Supremo la tensión ha ido creciendo en los últimos días en Cataluña, donde se han registrado graves disturbios que han llevado a la detención de al menos 97 personas.
En previsión a la jornada de huelga general, la compañía aérea Iberia canceló ayer doce vuelos entre Madrid y Barcelona (seis de ida y seis de vuelta) programados para hoy.
La sede diplomática de Estados Unidos y otras embajadas alertan a sus ciudadanos sobre la huelga.
Origen de la crisis
— Sentencia
La ciudad de Barcelona es el centro de las protestas por la sentencia del Tribunal Supremo que condenó el lunes pasado a varios líderes independentistas a penas de prisión por el proceso soberanista ilegal de 2017.