SANTO DOMINGO.-El incidente ocurrido esta mañana en la línea II del Metro de Santo Domingo, donde un joven se incendió y provocó daños a una veintena de pasajeros, puso en evidencia la vulnerabilidad del moderno sistema de transporte, dónde no se ha puesto en función los detectores de metales ni materiales inflamables.
Sin embargo, el subdirector de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret), a cargo del Metro, Leonel Carrasco, minimizó el incidente, aunque dijo que no se podía descartar ninguna hipótesis hasta tanto las autoridades concluyan las investigaciones.
“Cuando uno maneja 190 millones de pasajes y no le ocurre nada, eso es una dicha de Dios, ahora en el momento en que ocurrió el hecho es una hora pico, entonces en ese momento, entran una cantidad de estudiantes que son considerables y eso nos crea una dificultad, aunque nunca se ha perdido la vigilancia”, respondió Carrasco al ser cuestionado en relación al porque no están en función los detectores de metales, armas o material inflamable.
Hasta el momento, en la línea 2 del Metro operan 45 vagones, equivalente a 15 trenes, que mueven unas 80 mil personas cada día.
Carrasco no dijo sí la Opret cubrirá las afecciones de los afectados, aunque adelantó que el tren tiene un seguro.
La acción que provocó gran revuelo alrededor de las 8:30 de la mañana entre los estaciones de Presidente Horacio Vásquez y la Mauricio Báez (en dirección Este-Oeste) de la avenida V Centenario obligó a paralizar abruptamente el servicio por 45 minutos en la referida ruta
“La Policía tiene en sus manos el tren y todas las evidencias que quedaron y, el Cuerpo Especializado de Seguridad del Metro nos van a dar un informe de ese incidente penoso, el cual arrojó cuatro personas con quemaduras de primer y segundo grado, quienes fueron llevados al Hospital Luis Eduardo Aybar” detalló Leonel Carrasco, subdirector y vocero de la Opret.
Afirmó que probablemente la mayor cantidad de personas lesionadas, se originaran porque estas salieron despavoridas, tropezaron o se cayeron.