Hay que admitir que el seguimiento al béisbol ha disminuido en el país en las últimas décadas, sin embargo, todavía ese espectáculo continúa teniendo una gran incidencia en en los estratos bajos y medios.

El aspecto económico tiene una relevancia de primer orden, condición que es reconocida por todos, al punto que el presidente Luis Abinader lo puso de manifiesto en el encuentro que sostuvo el pasado martes con Fred Manfred, Comisionado de la MLB.

Para nadie es secreto el interés que tienen desde hace años casi todas las organizaciones de Grandes Ligas en construir sus academias en el país, lo que se traduce en beneficios para la economía nacional.
En esos centros, la casi totalidad ubicados en el municipio de Boca Chica, mejoran sus condiciones atléticas y académicas, centenares de jóvenes dominicanos y extranjeros.

Conociendo la importancia que tienen esas inversiones para el país, Abinader aprovechó esa reunión para instar a las Grandes Ligas a seguir consolidando sus relaciones con el país.

Mientras tanto, en el plano del béisbol de invierno se observa que la Liga ha venido trabajando con firmeza para mejorar el espectáculo en lo competitivo, pero todavía le restan por solucionar muchos aspectos básicos para que el fanático se interese más en asistir a los estadios.

Vitelio Mejía, presidente de la Liga, sabe lo que tiene entre manos, pero en ese mismo contexto en el que ha venido “pujando” en busca de mejorar, también lo tienen que asumir con más ahínco los dueños de todos los equipos, que son los principales responsabables de presentar un torneo de primer nivel.

Aunque hay que admitir que la mayoría de los conjuntos han realizado una gran inversión en la captación de un buen material importado.

RADARES.- Después de su primer revés ante la Répública Checa en el inicio del preolímpico de voleibol que se efectúa en China, las Reynas del Caribe han venido desarrollando muy buen trabajo, al hilvanar tres victorias consecutivas, que deben mantener en alto la moral del equipo, aunque sus próximos rivales serán un hueso duro de roer, dado que será frente a las potentes selecciones de Serbia, China y Países Bajos. Tienen por delante una tarea muy difícil, pero no imposible.