
SANTO DOMINGO.-“Antonio Imbert Barrera es un personaje fascinante cuya discreción y humildad fueron igual de superlativas como su enorme importancia en la historia dominicana de la segunda mitad del siglo pasado.
Su legado merece aquilatarse en su justa dimensión heroica, no sólo por matar a Rafael Leónidas Trujillo”.
Así lo afirma José Báez Guerrero, abogado, periodista y escritor, al describir las cualidades del héroe antitrujillista Antonio Imbert Barrera, pues la semana pasada fue presentada la obra “Antonio Imbert Barrera: Su vida y época”, una joya histórica que fue escrita por él y publicada por Giralda Busto, Vda. Imbert.
¿Cuál es la esencia de “Antonio Imbert Barrera: Su vida y época”, que es su vigésimo quinto libro, y cuánto tiempo duró para escribirla?
Esta nueva obra es esencialmente un relato de la vida de Antonio Imbert Barrera, uno de los ajusticiadores de Trujillo, que comencé a escribir hace más de una década. Tuve la fortuna de conocer a Imbert en los años 80 y luego entrevistarlo varias veces cuando realicé mi investigación para escribir en 2007 la biografía del presidente Antonio Guzmán, que sigue vendiéndose bastante bien.
Este libro fue escrito íntegramente por mí, pero publicado por la viuda del biografiado, quien adquirió los derechos patrimoniales de la obra.
Increíblemente debí hacerlo tres veces, por causas que ahora me reservo. Aun así hubo en esta primera edición errores y dislates ajenos que confío que corregirán en reimpresiones siguientes. Aunque nadie sea perfecto, hay reglas y normas editoriales que merecen respeto.
¿Cuáles logros o hazañas narra sobre Imbert Barrera en su trayectoria militar y política?
Imbert fue hecho general por el Consejo de Estado, sin antes haber sido militar, para facilitar su seguridad personal, pues las Fuerzas Armadas continuaban siendo muy trujillistas pese a la decapitación de la tiranía. Le tomó muchas décadas superar el rechazo de la oficialidad.
Sus roles políticos fueron circunstanciales, pues la Constitución prohibe a los militares participar en política partidista. Por ejemplo, presidió el Gobierno durante la Revolución de 1965, pero mediatizado porque el poder real lo tenían las fuerzas de ocupación estadounidenses y en la diminuta zona constitucionalista los boschistas pusieron al coronel Caamaño como su presidente.

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Erika Rodríguez
Periodista, ganadora del Premio Nacional de Periodismo Turístico Epifanio Lantigua en la categoría Gastronomía y Turismo.