Ante el incremento de los fraudes cibernéticos en el mundo, la inversión en seguridad digital es una prioridad que deben adoptar tanto consumidores como empresas.
Una de las premisas de Mastercard es la adopción de tecnologías de punta en las experiencias de pago para ayudar a reducir niveles de fraude y, a su vez, garantizar una mejor experiencia para el consumidor.
Según el New Payment Index de Mastercard, se detectó que en América Latina el 83 % de las personas plantea usar al menos un método de pago emergente en el próximo año.
De ahí, la importancia de que cada vez más personas cuenten con una identidad digital (ID), que hasta el día de hoy es la herramienta clave y una oportunidad mayor para generar confianza digital y combatir el fraude global.
La apuesta de Mastercard es la creación de un ecosistema de identidad digital (ID) que le permita tanto a instituciones como a individuos realizar transacciones fáciles, rápidas y fiables.
El acceso a una identidad digital traerá nuevas experiencias para el consumidor en la medida en la que éste interactúe con empresas, proveedores de servicios y sus comunidades digitales, dando origen a prácticas de compras online más eficientes y a procesos más transparentes a la hora de abrir una cuenta bancaria o gestionar impuestos; simplificando el uso del correo electrónico, redes sociales y plataformas de entretenimiento.