Santo Domingo.- Este lunes se conmemora el Día Mundial de la Tiroides, fecha que tienen por objetivo recordar las funciones y enfermedades de la glándula tiroides que afectan a la humanidad desde hace siglos.
Es un tipo de cáncer con mortalidad importante entre las mujeres y letalidad acentuada entre los hombres.
Datos de la octava causa de malignidad en la mujer y representa el uno por ciento de todos los cánceres. Cuando se detecta en el hombre la posibilidad de cáncer es mayor.
La enfermedad se presenta como un nódulo en la tiroides (lesión en glándula tiroides radiológicamente distinta a la del parénquima tiroideo).
“Nueve de cada diez personas con cáncer de tiroides son de tipos diferenciados; es decir, suelen ser de crecimiento muy lento e indolentes. Si se detectan de forma temprana, la mayoría de estos cánceres pueden tratarse exitosamente”, asegura la doctora Alicia Troncoso, presidenta de la Sociedad Dominicana de Endocrinología y Nutrición.
En un mensaje de la entidad, la endocrinóloga detalló que las personas que han tenido exposición a radiación durante la infancia o recibieron tratamiento radiactivo en cabeza y cuello por problemas médicos a una edad temprana, son vulnerables a padecer la enfermedad.
A este grupo se suman las personas “con historia familiar de cáncer de tiroides y antecedentes personales o familiares de síndromes clínicos asociados a mayor riesgo de cáncer de tiroides” y “con nódulos tiroideos antes de la edad de 20 años o después de los 70 años”, indicó.
Troncoso explicó que el pronóstico para cualquier individuo con cáncer tiroideo depende de varios factores, lo que incluye el tipo histológico del cáncer tiroideo, tamaño del tumor, diseminación del tumor a otras partes del cuerpo (metástasis), en especial si existe diseminación a distancia o no, y la edad del paciente al momento del diagnóstico.
En general, sólo el 5 por ciento de los nódulos que aparecen en la tiroides son asiento de cáncer, puntualiza la doctora Troncoso.
Un estudio realizado en la República Dominicana y presentado como póster en la Reunión Anual de la American Thyroid Association en 2016, con unos mil pacientes, reveló que la probabilidad de tener malignidad en un nódulo de la tiroides fue de alrededor del 3 por ciento.
El cáncer tiroideo es fácilmente tratable cuando se diagnostica a tiempo y temprano, de acuerdo a las informaciones de la Sociedad de Endocrinología aparecidas en un reportaje publicado por el portal www.resumendesalud.net, especializado en difusión de informaciones médicas.
Entre los cánceres más frecuentes se encuentran carcinomas papilares, que constituyen el 80 por ciento de los casos; carcinomas foliculares en un 10 por ciento y tienen excelente sobrevida.
El carcinoma medular ocurre en un 2-3 por ciento, con menor sobrevida que los carcinomas papilares y foliculares, y puede diseminarse a ganglios y otros tejidos con más frecuencia.
El carcinoma indiferenciado o anaplásico ocurre en un 1-2 por ciento, con una sobrevida muy corta, de menos de 6 meses cuando se detecta.
El tratamiento del cáncer de tiroides incluye cirugía como primer paso para eliminar la totalidad o la mayor parte del cáncer.
“Luego se le administra yodo radiactivo (RAI) para muchos pacientes con cáncer tiroideo bien diferenciado, para eliminar cualquier célula cancerosa que haya quedado después de la cirugía o tejido tiroideo residual que el cirujano no haya podido extirpar. Esto evitaría la reaparición y la total curación del cáncer”, observó la doctora Troncoso.
Agregó que posterior a la cirugía, el paciente debe recibir tratamiento con hormonas tiroideas (levotiroxina) para sustituir la hormona que le falta, para el resto de su vida.