Santo Domingo.- En la actualidad, cerca de 215 millones de niños trabajan en el mundo, muchos a tiempo completo. Ellos no van a la escuela y no tienen tiempo para jugar. Muchos no reciben alimentación ni cuidados apropiados, negando la oportunidad de ser niños.
Más de la mitad de estos niños están expuestos a las peores formas de trabajo infantil como trabajo en ambientes peligrosos, esclavitud, y otras formas de trabajo forzoso, actividades ilícitas incluyendo el tráfico de drogas y prostitución, así como su participación involuntaria en los conflictos armados.
Un gran número de niños hacen trabajos domésticos, remunerados o no, en los hogares de terceras personas. Sus vidas transcurren ocultas a la mirada de la sociedad y lo habitual es que se encuentren aislados y alejados de sus familias.
Por ello, estos menores son particularmente vulnerables a la explotación y las historias de abuso son muy frecuentes.
El tema de este año es «Eliminar el trabajo infantil en las cadenas de producción ¡Es cosa de todos!» y está dedicado al trabajo infantil en las cadenas de producción.
Con 168 millones de niños que todavía son víctimas del trabajo infantil, todas las cadenas de suministro, de la agricultura a la manufactura, de los servicios a la construcción, corren el riesgo de que el trabajo infantil esté presente.
A fin de apoyar a las empresas en sus acciones para eliminar el trabajo infantil en sus cadenas de producción, la OIT y la Organización Internacional de Empleadores (OIE) crearon conjuntamente una herramienta de orientación sobre trabajo infantil, dirigida a las empresas que desean fortalecer sus conocimientos y capacidad de llevar a cabo sus negocios respetando las normas internacionales del trabajo relativas al trabajo infantil.
Cortesía de las Naciones Unidas