Honras fúnebres expresidente Instituto Duartiano serán el 25 de marzo en Puerta del Cielo

Honras fúnebres expresidente Instituto Duartiano serán el 25 de marzo en Puerta del Cielo

Honras fúnebres expresidente Instituto Duartiano serán el 25 de marzo en Puerta del Cielo

SANTO DOMINGO.– Serán a las 10 de la mañana del viernes 25 de marzo, en el Parque Cementerio Puerta del Cielo, las honras fúnebres del expresidente del Instituto Duartiano, profesor José Joaquín Pérez Saviñón, quien falleció en la tarde del pasado martes por quebrantos de salud, como consecuencia de su edad nonagenaria.

En un comunicado de prensa, la entidad patriótica lamentó el deceso de su pasado presidente y resaltó los invaluables aportes a la Nación realizados por Pérez Saviñón durante los 93 años que vivió y quien dirigió su junta directiva nacional en el período comprendido entre 1995 y 2019.

El documento indica que el Instituto Duartiano coordina con los familiares el protocolo para rendirle los honores a este ciudadano ejemplar.

El profesor Pérez Saviñón fue un distinguido miembro de número del Instituto Duartiano, que dedicó su vida a causas nobles y durante muchos años estuvo consagrado, junto a hermano Manolo Pérez Saviñón, a la dirección en el país del movimiento Scouts.

En la guerra de abril de 1965 se destacó por la gran labor de asistencia a personas heridas durante los encuentros armados, apoyándose en la Cruz Roja Dominicana.

Hizo una loable labor patriótica de difusión y logró impulsar al Instituto Duartiano, mediante la realización del programa “Duarte Forjador de la Patria”, que aún se difunde los sábados por la radioemisora cultural La Voz de la Fuerzas Armadas; también escribió un interesante trabajo titulado “La verdadera historia de Juan Pablo Duarte”, versión popular ampliamente distribuida entre escolares y público en general.

Nació en Santo Domingo el 28 de noviembre del 1928, cursó estudios en el Colegio Santo Tomás, Escuela Normal de Varones y la Universidad de Santo Domingo e Ingresó al movimiento Scouts en el 1942, desde entonces cultivó los más puros ideales y se dedicó a la formación de mejores ciudadanos, educando en civismo, patriotismo y moralidad a la juventud de la época.

En el 1944 centenario de la Independencia fundó la Tropa Juan Pablo Duarte, empezó sus esfuerzos por unir los Scouts de toda la República y propició el turismo interno para dar a conocer las bellezas vírgenes de todo el país a la juventud dominicana, organizando excursiones por todo el territorio nacional.

Fundó los grupos Scouts de Santiago, Azua, Pedernales, Puerto Plata, Hato mayor, Sánchez, Miches, Sabana de la Mar, Moca, Constanza, Barahona, entre otros muchos y fue cuatro veces jefe de Scouts Nacional y tres veces presidente de la asociación.

Organizó la primera asamblea Nacional en la Vega Real y la primera salida de los Scouts al exterior, hacia Canadá. Promovió y consiguió el local de la Oficina Nacional y el primer Camporee, así como la asistencia al primer Jamboree y a la conferencia mundial.

Presidió la delegación dominicana a la Conferencia Mundial en Jamaica, ayudó en la redacción de los estatutos (P.O.R) y en la Ley de Protección al Movimiento Scouts, así como en la incorporación.

Fundó el adiestramiento de dirigentes y el servicio profesional, así como la tienda Scouts y la impresión de manuales y especialidades, instituyó la “Correa de Manigua” y el “Scouts Enriquillo”, fundó la revista “Hacia la Cima” y promovió la adquisición y desarrollo del Campo Escuela.

Cursó ingeniería agrimensura en la Universidad de Santo Domingo y trabajó en la Dirección General de Minería en la prospección de minerales radioactivos del 1956-1959. Fue cofundador del Instituto de bioconservación del Medio Ambiente, propiciando la siembra de miles de árboles y ayudó a elaborar las leyes que fueron aprobadas para la protección del país.

Participó en todos los operativos de ayuda y rescate en los ciclones y fenómenos naturales y catástrofes que han afectado la nación.

Durante la guerra de 1965, organizó las brigadas de rescate de heridos, vacunaciones, saneamiento, aprovisionamiento de medicinas y alimentos, entre otros, ayudó en la formación de la Defensa Civil. Por estas labores le fueron otorgadas las Medallas al Mérito y la más alta condecoración de los Scouts Dominicanos “La Trinitaria de Plata”.

Asimismo, recibió el reconocimiento de la Cruz Roja, Care y otras instituciones, ocupó por 24 años la presidencia del Instituto Duartiano, creando 37 centros duartianos en el país y 30 filiales en el exterior.

Impartió cursos talleres mediante los cuales se educa en los ideales del padre de la Patria, en civismo, patriotismo y defensa de la nacionalidad. Distribuyó cientos de miles de folletos, libros y retratos de Juan Pablo Duarte en toda República y el exterior, y organizado conferencias, charlas, entrevistas, simposios y artículos sobre la vida del apóstol, para una mejor formación ciudadana, como nunca antes se había hecho en toda la historia del país.

Organizó el museo de la casa de Duarte y lo enriqueció y conservó, creó la biblioteca, la exhibición itinerante del museo, la cual se lleva a los pueblos y al exterior. Consiguió la colección numismática de Duarte y la colección filatélica para el Museo de la Casa de Duarte.

Asimismo, recibió los honores como “Protector de la naturaleza”, “Reconocimiento al mérito cívico”, por conducta ejemplar por más de 40 años de servicio de la juventud; además, “reconocimiento a la responsabilidad ciudadana”, “Citación de Care Internacional”, entre otros.

Fue elegido coordinador del Comité “Haití es responsabilidad de la Comunidad Internacional”, en nombre de la República.

El profesor Pérez Saviñón con su ideal patriótico ha sido uno de los presidentes del Instituto Duartiano que más ha elevado la difusión de la vida y obra de Duarte, contribuyendo de manera activa a la reorganización y formación de centros duartianos, ha firmado convenios con instituciones civiles y oficiales para realizar cursos talleres, adquisición de materiales y una mejor organización de la planta física.

Los méritos alcanzados por él en la dirección del Instituto Duartiano se debe al inagotable esfuerzo para mantener la unidad de la membresía duartiana, logrando un trabajo en equipo, y dicho sea de paso la difusión de Duarte en esferas nacionales e internacionales.



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