El político estadounidense John F. Kennedy afirmó: “Un hombre inteligente es aquel que sabe ser tan inteligente como para contratar gente más inteligente que él”.

En el mundo de hoy no suele hacerse caso a ese tipo de planteamientos, debido a la existencia de una cultura autoritaria generalizada, en la que mucha gente se considera superior a los demás, olvidando la proclamación universal de que todos somos iguales en dignidad y en derechos.