SANTO DOMINGO.– Un hombre resultó muerto de un disparo cuando junto a otras dos personas intentó asaltar una finca ubicada en el municipio de Moca, provincia Espaillat, para despojar al propietario del lugar de la suma de RD$300 mil que estaban destinados para el pago de sus empleados, informó este sábado la Policía.
La institución identificó al fallecido como Cristian Rosario Santos (Guardia), cuyo cadáver fue dejado abandonado por quienes le acompañaban en el asalto en la acera de la calle Osvaldo Bazil, del sector Los Prados en el Distrito Nacional.
Indicó que Rosario Santos, quien falleció a causa de herida de contacto por proyectil de arma de fuego en el costado derecho, según el diagnóstico del médico legista actuante, residía en la calle Respaldo 39, No.20 del sector Cristo Rey.
Por el caso se encuentra detenido Ronnal Ambiorix Núñez, de 25 años,mientras que otro hombre solo identificado como “Luido” es perseguido por la Policía.
El informe preliminar del caso refiere que, según las declaraciones del hermano del occiso, José Luis Fernández Santos, de 29 años, su también hermano Kelvin Rosario, quien guarda prisión en la cárcel de La Victoria, le manifestó vía telefónica que horas antes Cristian le había dicho que saldría junto a Ronnal Ambiorix Núñez y otra persona hacia la ciudad de Moca a realizar un asalto en una finca de esa localidad, justo a la hora del pago a los trabajadores.
Mientras que Ronnal, tras ser apresado en el lugar donde fue encontrado el cadáver de Cristian, dijo que salió en compañía del fallecido y “Luido” a bordo del carro marca Honda Fit, de otros datos bajo investigación, y se reunieron con alguien identificado solo como “Blady”, quien era el contacto y la persona que les entregó la pistola marca carandaí No. G30847, con la que realizarían el asalto en la finca, cuando fueron sorprendidos por el propietario del lugar.
Dijo que en ese momento se originó un intercambio de disparos en el que Cristian resultó con la herida antes señalada, al momento de sustraer la jeepeta marca Lexus, propiedad del dueño de la finca, falleciendo mientras era socorrido por sus acompañantes de camino hacia la ciudad de Santo Domingo, quienes dejaron su cadáver en la dirección anteriormente referida, junto a una cartera conteniendo en su interior varios frascos de cremas y perfumes vacíos.