Circula muy callado que hay cierto acercamiento entre los partidos de la Liberación Dominicana y Revolucionario Moderno para llegar a un punto de entendimiento que haga potable una reforma de la Constitución.
Por ahí se advierte que las negociaciones pudieran incluir también viabilizar acciones que neutralicen cualquier posibilidad del expresidente Leonel Fernández llegar nuevamente al Palacio Nacional.
Sin embargo, los más recientes sondeos no ubican en buenas posiciones al PRM, cuando se trabaja muy calladamente por la reelección del presidente Luis Abinader.
La reforma constitucional, colocada en la agenda de discusión del Consejo Económico y Social, es de vital importancia para los planes del Gobierno y del PRM, no sólo por el aspecto de la independencia del Ministerio Público, sino por las cuestiones que pudieran derivarse de la apertura de la Asamblea Nacional, a lo que temen Fernández y la Fuerza del Pueblo, así como algunos sectores dentro del PLD.
Es decir, que las proyecciones apuntan a que el PRM no supera el 35 % de las simpatías, lo que es motivo de alarma para los comicios de 2024, más cuando es creciente la manifestación de desagrado y de malestar en algunos sectores, además de posibles conflictos internos que podrían surgir.
