Hartazgo de Haití

El Estado haitiano se encuentra colapsado y las bandas armadas continúan ampliando su control territorial, sembrando el terror incluso en zonas antes relativamente estables.
Esta situación multiplica el riesgo para la República Dominicana, que debe comenzar a prepararse para lo peor.
A esto se suma el incumplimiento con la misión multinacional de apoyo a la seguridad en Haití, liderada por Kenia.
Aunque fue aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU en octubre de 2023, su despliegue ha sido postergado repetidamente por razones administrativas, judiciales y presupuestarias.
Las promesas de financiamiento y apoyo logístico hechas por varios países, incluyendo Estados Unidos, han llegado tarde o siguen sin materializarse.
Y aun si llegara a ejecutarse en su forma actual, se trata de una fuerza insuficiente para enfrentar el poder real de las bandas, que poseen armamento superior al de muchas unidades militares en la región.
En medio de este contexto, resulta contradictorio que una entidad como Amnistía Internacional, que ni siquiera cuenta con personal permanente sobre el terreno en Haití, centre su atención en criticar a República Dominicana, como si pretendiera que cargue sola con las consecuencias del colapso haitiano.
En lugar de respaldar una intervención internacional urgente o fortalecer el trabajo con organizaciones locales haitianas, la organización ha preferido enfocar su presión sobre el único país que, con limitaciones y recursos finitos, ha sostenido parte del peso de la crisis en el terreno migratorio y humanitario.
Mientras las bandas armadas se acercan a comunidades fronterizas haitianas, elevando el nivel de amenaza, Amnistía guarda silencio sobre la urgencia de una acción internacional contundente para restaurar el orden en Haití.
Esa misma organización bien podría sumarse al clamor dominicano, y de buena parte de los propios haitianos, para que la comunidad internacional actúe, cumpla sus promesas y contribuya con hechos a pacificar un país donde los muertos ya se cuentan por decenas de miles.