El presidente Danilo Medina, en un año y medio de Gobierno, aún no ha remeneado la mata para hacer grandes cambios en la administración pública, sobre todo de funcionarios que ocupan cargos desde la llegada del PLD al poder en 1996.
Esto ocurre a pesar de que el pueblo pide caras nuevas.
¿Y los precandidatos?
Cuando Medina era secretario Administrativo de la Presidencia renunció a la posición para buscar la candidatura presidencial.
¿Lo hizo por ética? Si fue por ética que lo hizo, entonces este ejemplo debe ser asumido por los dirigentes que ahora aspiran a la nominación presidencial y ejercen funciones públicas.