
BOGOTÁ.-Gustavo Petro lleva tres horas de discurso y la plaza es un solo silencio. La promesa de cambio es omnipresente. Nunca antes un exguerrillero había seducido tanto en Colombia, un país gobernado históricamente por la derecha.
Exalcalde de Bogotá, exrebelde de los "buenos", de los que hablaban más y disparaban menos, Petro ha conseguido lo que parecía inimaginable: que la izquierda llegara a una elección con opciones de gobernar a este país de 49 millones de habitantes y aliado tradicional de Estados Unidos.
Fue un "pésimo guerrillero en armas, pero buen guerrillero político". Juan Montaña, de 70 años, suelta la frase en conversación con la AFP. "Juancho" acompañó al candidato del movimiento Colombia Humana en su aventura insurgente de los años ochenta.
En esta noche de jueves, se agita con la multitud cuando resuenan las promesas de reforma profunda y equidad que lanza Petro desde la tarima de la Plaza de Bolívar de Bogotá, el escenario público número 35 que visita -y llena- en tres meses de contienda.
De 58 años y lector voraz de la obra de Gabriel García Márquez, el también exsenador marcha en el segundo lugar de las preferencias para la primera vuelta del domingo.
Si las encuestas no yerran, se medirá en un balotaje el 17 de junio con el derechista Iván Duque, apadrinado del expresidente Álvaro Uribe (2002-2010).
En uno de los tres países más desiguales de América, el discurso antisistema de Petro y su reivindicación de los pobres ha calado después del histórico acuerdo de paz que desarmó y transformó en partido a la exguerrilla FARC.
"Sin terror"
Días antes de llenar la plaza, Petro defendió su propuesta de cambio en un inusual encuentro con los medios. "La sociedad se ha despercudido del miedo que produce la violencia y el terror, y su expresión política es esto que vemos hoy, que llena plazas y reúne multitudes", dice a la AFP.
A Petro -que creció en el Caribe colombiano- le gusta hablar largo, rara vez pierde la calma en público y casi siempre lleva vaqueros y camisas holgadas, aunque no rechaza la corbata. Montaña recuerda a "Gustavo" como el hombre de las ideas. "Nosotros éramos los hijos de puta que echábamos tiros y él hacía lo importante".
Con 17 años, Petro se unió al Movimiento 19 de Abril (M-19). Por coincidencia este economista nació el mismo día y mes, pero en 1960. El M-19 surgió como un grupo rebelde nacionalista. En esa época, jóvenes izquierdistas de clase media urbana que cuestionaban el marxismo, se levantaron en armas tras denunciar un fraude electoral en 1970 a favor del tradicional Partido Conservador. Veinte años después "El eme" firmó la paz, depuso fusiles y ayudó a redactar la Constitución de principios liberales que rige desde 1991.
Hoy, Petro vuelve a desempolvar el fantasma de un supuesto fraude en los comicios del domingo.
