Guía para la reforma policial (y 4)

Guía para la reforma policial (y 4)

Guía para la reforma policial (y 4)

Policía Nacional

Continuar fortaleciendo el sistema de carrera desde el ingreso, respetando el escalafón, los procesos de nuevo ingreso de los aspirantes a ser cadetes o policías (conscriptos), estableciendo los concursos con exámenes de oposición, también, aplicarlo para los docentes y en la selección de puestos creando los perfiles para cada función, como los están haciendo en el Departamento Nacional de Investigaciones (DNI), lo mejor de los aspirantes o del mando (según sus méritos, ética, preparación y capacidades) en las diferentes direcciones centrales, regionales y de áreas o departamentos, secciones y oficinas. Esa selección de perfiles de ingreso debe ser rigurosa y transparente.

La institución debe ser auditada seriamente para determinar cuántos policías tenemos, dónde están, cuáles son las capacidades institucionales, el equipamiento y sedes o destacamentos de que se dispone, cuál es el estado de su planta física y funcionalidad, además, organizar en apego a la transparencia.

La supervisoría y fiscalización de las labores y conductas de los policías, debe ser permanente y profesional.

No puede hacerse una verdadera reforma integral de la institución, si no hay mecanismos de control interno ágiles, eficaces e independientes (Asuntos Internos, -no debe estar subordinado al Director General de la PN- e Inspectorías que funcionen).

Establecer un sistema de fiscalización de la función policial y de la conducta de cada policía diaria y continua, en las tareas de patrullas de prevención, orientación y participación comunitaria; de tal modo que haya récord y registro de las actividades del servicio, mediante el llenado oportuno y riguroso de los formularios de cada actuación para fortalecer la credibilidad y la transparencia.

Uso de cámaras de cuerpo o bodycam en los uniformes, y una conexión permanente y oportuna con la sede central de cada lugar o cuadrantes de trabajo. Para tales fines recomendamos la creación del Centro de Control de Confianza que mide y alerta la violación a cada protocolo o reglamentación. Modernizar o crear un sistema de recolección de datos, análisis y distribución de información interinstitucional.

Modernizar el sistema de investigaciones con enfoque científico y evolución de datos georreferenciados o mapeo. Solucionar el círculo vicioso de inseguridad que está contenido en el deterioro ético-moral, la inercia e ineficacia de las acciones preventivas penales.

El Hospital General de la Policía Nacional debe fortalecer las evaluaciones psicométricas y de medicina forense. Redefinir y reformar el Observatorio de la Seguridad Ciudadana, centrado en las tareas y el servicio de la PN.

Debiendo profundizar en solucionar las fallas de cifras negras o desconocidas en cuanto a las estadísticas de los hechos criminosos que reflejan la violencia en todas sus manifestaciones.
Deliberamos y proponemos hacer estudios científicos, criminológicos, sociológicos de la delincuencia y la violencia en todas sus manifestaciones de los diferentes núcleos sociales y de acuerdo a las variaciones socioculturales de cada comunidad.

De ser posible, enfocarlo por cada cien mil habitantes para lograr un banco estadístico de datos específicos del comportamiento social, del delito y el delincuente “documentación delictiva” y el programa Constantino que fue creado y patentado por el General Juan G. Brown Pérez PN.

Dicho banco de recolección de información, debe ser serio, usado con transparencia y que pueda servir de base para dar respuestas certeras, primero a la prevención, segundo al control social y tercero a la persecución de los violadores de la ley.

En dicha base de datos los policías deben tener acceso a todas las informaciones y datos de inteligencia, judiciales, de la Junta Central, Migración, DNI, placas y vehículos de motor, entre otras.
Dios bendiga siempre al pueblo dominicano. Todo por la patria.

*Por Juan Tomas Taveras