Se ha iniciado una guerra de encuestas, pues ahora se trabajará el tema de la sicología política, con tal de entusiasmar a dirigentes y militantes para que se motiven a realizar el trabajo electoral imprescindible en procesos como el de las primarias abiertas o cerradas que se celebrarán el 6 de octubre.
Lo interesante de ese proceso es que en cuestión de tres semanas, sin importar resultados, analistas y encuestas quedarán al descubierto y en descrédito para el proceso de mayo próximo.