Santo Domingo.- Luego de una reunión que sostuviera en la mañana de este jueves el presidente de la República, Luis Abinader, con los organismos de socorro, para dar seguimiento a la tormenta tropical Franklin, determinaron que el Gran Santo Domingo fue la zona del país que más se vio afectada por inundaciones.

Allí se ha realizado una intervención inmediata en cada una de las barriadas vulnerables con la entrega de raciones tanto cocidas como crudas, para poder mitigar el impacto del fenómeno en las familias de esos sectores.

Se instruyó a las Empresas Distribuidoras de Electricidad (EDES) e Inapa para que puedan poner en funcionamiento los circuitos y acueductos, a fin de restablecer servicios tan básicos como agua y luz.

De acuerdo con el ministro Administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza, el impacto de este evento fue menor al estimado, destacando la labor preventiva de las alcaldías y los cuerpos de emergencias.

Ministro Administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza

No obstante, en los levantamientos que se han realizado hasta el momento en todo el territorio dominicano han podido observar afectaciones amplias, sobre todo, en materia de infraestructuras que dejan en evidencia algunas debilidades.

Tal es el caso algunos puentes o vías de comunicación como la carretera del Cruce de Ocoa, cuya reparación e intervención pueden tener un gasto importante.

Paliza manifestó que el jefe de Estado solicitó el levantamiento de los daños y los planes operativos de las diferentes instituciones, para poder atender cada una de las vicisitudes y realidades que quedaron manifiestas por el paso de Franklin.

En la jornada de trabajo de información y de intercambio de ideas, participaron el Centro de Operaciones de Emergencias (COE), Defensa Civil y las instituciones gubernamentales que tienen un corte social y las vinculadas a los servicios básicos de la población.

En refugios

Paliza puntualizó que todo el país, unas 800 personas se encuentran en los diferentes albergues esperando que los ríos vuelvan a su relativa normalidad, para poder regresar a sus hogares, siendo el refugio de El Capotillo el que más personas tiene.

Precisó que la prioridad es regresar a esas familias a sus casas, en la medida de lo posible.