Nueva York.-General Electric Co. Decidió tomar una audaz medida para determinar el futuro de la producción fabril con dos acuerdos con empresas de impresión 3D, marcando el apoyo más significativo a esta tecnología a la fecha.
El gigante industrial presentó ofertas para adquirir la empresa sueca Arcam AB y la alemana SLM Solutions Group AG en transacciones combinadas avaluadas en US$1,400 millones, anunció GE en un comunicado ayer.
Las compras impulsarán las operaciones existentes de GE y ayudarán a la compañía a crear un negocio de impresión 3D de US$1,000 millones hacia 2020, se lee.
La medida “se suma a nuestra estrategia para transformarnos en la principal empresa de la industria digital”, dijo el máximo responsable ejecutivo de GE, Jeffrey Immelt, en una conferencia telefónica con analistas.
“Estas dos compañías proporcionan, además del equipamiento preciso, un número de ideas en términos de lo que podemos hacer en el futuro”.
GE ha reorientado su negocio en torno a la fabricación industrial y software complementario, tras las iniciativas de ventas de gran parte de sus divisiones financieras y centradas en el consumidor.
La empresa con sede en Boston, el mayor productor de motores de reacción y turbinas de gas del mundo, está utilizando cada vez más la impresión 3D para fabricar piezas para equipos y prototipos.
El mercado mundial de la impresión 3D está creciendo, mientras las compañías utilizan cada vez más la tecnología para producir piezas comerciales.
El sector de aviación fue uno de los primeros en adoptarla por que permite diseños más complejos y piezas más livianas, recortando el gasto de materiales costosos para los pisos de las fábricas.
GE anunció que espera imprimir 40,000 inyectores de combustible para motores de reacción hacia 2020.
Producción de las piezas
Las impresoras 3D construyen objetos al fusionar delgadas capas de materiales como polvo plástico, metal o resina líquida.
Las piezas, elaboradas a partir de prototipos diseñados por computador, pueden utilizarse para fabricar productos que van desde piezas para automóviles hasta implantes quirúrgicos.
La medida de GE podría generar una ola de adquisiciones en el sector, según Rachel Gordon, analista de IDTechEx. Hasta ahora, las empresas “comúnmente han comprado una o dos máquinas para investigación y desarrollo”, dijo.
Las compañías ahora “están empezando a usarlas para producir piezas efectivamente y adquirir un mayor número de máquinas”.
El crecimiento en la fabricación 3D podría impulsar la necesidad de 1,000 máquinas en GE para 2025, dijo David Joyce, máximo responsable ejecutivo de GE Aviation y líder del proyecto de integración de Arcam y SLM, en la conferencia telefónica.
Existencias del sector
El anuncio de GE produjo un repunte en las acciones de las empresas de impresoras 3D, con 3D Systems Corp. creciendo un 7,2 porciento, Stratasys Ltd. ganando un 6,7 por ciento y Voxeljet AG aumentando un 9,2 por ciento a las 11:25 a.m. en Nueva York.
GE cayó un 1,3 por ciento a US$30,88.
Aunque la impresión 3D es promisoria, las adquisiciones de GE representan un “neto negativo” porque existen relativamente pocos beneficios a corto plazo, dijo Steve Tusa, analista de JPMorgan Chase & Co.