En primer lugar debemos definir la glándula hipofisaria (pituitaria) como una estructura del tamaño de una habichuela, situada en la base del cráneo (en la silla turca), que produce una gran cantidad de hormonas encargadas de controlar muchas funciones corporales, de ahí el origen de que se la llame la glándula maestra.
Los tumores que se originan en dicha estructura suelen ser adenomas, casi siempre benignos, y pueden ser: funcionantes (secretores de hormonas, que dan lugar a diferentes cuadros endocrinológicos) o no funcionantes (al no producir hormonas dan sintomatología cuando tienen gran tamaño, de forma que dañan la hipófisis y producen trastornos visuales).
Los comunes
Los tumores hipofisarios son relativamente comunes (1 a 8 casos por cada 100, 000 habitantes) y constituyen el 10-15% de todos los tumores intracraneales (son los terceros en frecuencia de los tumores intracraneales primarios). La mayor frecuencia se da entre la tercera y la sexta década de la vida, con predominio en el sexo femenino.
Los objetivos terapéuticos son disminuir los síntomas, normalizar los niveles hormonales, erradicar o controlar la lesión, reducir la morbilidad y minimizar el riesgo de afectar la función hipofisaria normal.
Las opciones terapéuticas actuales para los tumores de hipófisis incluyen tratamiento farmacológico y sustitutivo hormonal, la cirugía transesfenoidal endoscópica y la Radiocirugía con Gamma Knife.
La cirugía
El tratamiento quirúrgico está indicado en los casos de apoplejía hipofisaria, pérdida de visión, fístula (fuga) de líquido cefalorraquídeo (LCR), casos evolutivos que no responden a tratamiento farmacológico, endocrinopatías severas, pacientes que desean quedar embarazadas (prolactinoma), enfermedad de Cushing y Acromegalia.
Buenos resultados
En un gran número de tumores pituitarios la cirugía endoscópica es el tratamiento de primera línea, debido a la respuesta rápida y definitiva que muchas veces logra. Existen otros tumores de la región selar, como craneofaringiomas, que se están empezando a extirpar completamente por vía transnasal endoscópica.
Sabemos estadísticamente que el 40 por ciento de estos tumores volverán a crecer o quedarán porciones del mismo, que no pudieron extirparse por la localización del mismo y la Radiocirugía con Gamma Knife es la opción indicada para estos casos, ya que conforme con las guías de manejo de la International Radiosurgery Association (ISRA) se logra de un 90 a 100% de control del crecimiento tumoral y un 65 a 70% de reducción del tamaño tumoral.
A largo plazo
También logramos un control de la secreción hormonal de estos tumores a largo plazo en un 80 por ciento de los casos, siempre defendiendo y preservando la función visual y de la glándula hipofisaria.
Los tumores de hipófisis son la tercera indicación de Radiocirugía con Gamma Knife a nivel mundial con más de 45,000 casos tratados en 2012, según estadísticas de la Leksell Gammaknife Society.