
Santo Domingo. – A pocas semanas de cumplirse un año del anuncio de la fusión de los ministerios de Educación (Minerd) y de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (Mescyt), el proyecto aún no ha sido formalizado, ya que todavía no ha sido remitido al Congreso Nacional para su estudio y discusión por parte de los legisladores, quienes tienen la tarea de aprobar o rechazar la iniciativa.
La unificación de ambas entidades fue anunciada el 16 de septiembre de 2024 como parte de un plan de reformas presentado por el presidente Luis Abinader, a un mes de iniciar su segundo mandato, para hacer más eficiente la administración de los recursos del Estado.
La propuesta también contempla la fusión de otras instituciones, algunas de las cuales ya han iniciado su proceso de reorganización. Tal es el caso del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (Mepyd), que se fusionó con el Ministerio de Hacienda para crear el Ministerio de Hacienda y Economía, actualmente dirigido por Magín Díaz.
Mediante el Decreto 356-25, y en el marco del Plan de Eficientización y Racionalización de la Administración Pública, coordinado por el Ministerio de Administración Pública (MAP), el programa Supérate y la Administradora de Subsidios Sociales (Adess) se unificaron para dar origen a la Dirección de Desarrollo Social Supérate.
Otra institución incluida en la propuesta es el Instituto Agrario Dominicano (IAD), que pasará a formar parte del Ministerio de Agricultura con el objetivo de eliminar redundancias y garantizar el seguimiento a los asentamientos agrarios.
Este proceso de reorganización inició con la Resolución 01-25 del directorio del IAD, que dispone la integración y unificación de sus servicios de apoyo a los productores de la reforma agraria con los del Ministerio de Agricultura. Además, establece el traspaso al Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi) del manejo de pozos y bombas en asentamientos parcelarios, con el propósito de optimizar los servicios al sector rural.
A partir del 2026, también se integrarán a Agricultura, los servicios de fomento productivo, asistencia técnica, acceso al financiamiento, infraestructura rural, provisión de maquinaria y acompañamiento social, que actualmente ofrece el Instituto Agrario.
La propuesta sobre la fusión del Minerd y el Mescyt aún se encuentra en discusión, aunque se espera que sea presentada al Congreso en la actual legislatura, iniciada el pasado 16 de agosto.
Oposición a la medida
Pese a que el proyecto sigue en debate, la idea de unir ambas instituciones ha generado amplio rechazo entre organizaciones y expertos en el área educativa, quienes advierten que podría tener consecuencias negativas para el sector.
Tal es el caso, de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), que ha expresado su desacuerdo al considerar que la propuesta tiene como único propósito reducir la inversión pública en educación, un área que, a su juicio, requiere mayor financiamiento y una mejora en la calidad del gasto.
Según Eduardo Hidalgo, presidente del gremio que agrupa a los maestros, detrás del proyecto se esconden fines privatizadores que se evidencian en la idea de incorporar las alianzas público-privadas, el establecimiento de fideicomisos y la tercerización de la gestión educativa.
“Es un invento, que no está sustentada en ningún estudio o diagnóstico, que muestre la necesidad y viabilidad del mismo”, precisó el dirigente magisterial
Aseguró que, de materializarse la propuesta, la cual definió como un despropósito, causaría daños severos a los procesos que están desarrollando ambos ministerios, complicando la implementación de las acciones necesarias para lograr una gestión educativa más eficiente.
La Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), a través de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales (FCES) y el Centro de Pensamiento y Desarrollo, también se manifestó en contra de la fusión.
Para Antonio Ciriaco, decano de la Facultad de Economía de dicha casa de estudios, la unión de ambos ministerios no representa un ahorro significativo para el Estado.
“La lógica de esta fusión partió de un argumento económico con inexactitudes”, aseguró el economista, quien a la vez alertó que con esta medida se pretende establecer un sistema educativo bajo lineamientos autocráticos, que darían poderes extraordinarios al futuro ministro.
“Constituye un peligroso precedente el pretender asignarle a un ministro de educación la facultad, por ejemplo, para aprobar el currículo, acreditar instituciones de educación superior, entre otras atribuciones que hoy la ley confiere al Consenso Nacional de Educación", agregó.
Asimismo, el maestro Víctor Salazar del Centro de Pensamiento y Desarrollo, advirtió que el intento de fusión atenta contra la autonomía universitaria y el futuro de la formación profesional del país.
De igual forma, la Federación de Asociaciones de Profesores de la UASD (Faprouasd), ha catalogado como un atentando a la educación la propuesta, porque constituye una baja en la inversión del Gobierno en materia educativa.