LIMA.— La fiscal general de Perú inició dos investigaciones preliminares contra el presidente Pedro Castillo por presunta corrupción las cuales, según la ley, sólo podrán finalizar una vez concluido su mandato.
La primera investigación es porque Castillo presumiblemente se reunió con empresarios que habrían buscado construir un puente y, en otro caso, para vender combustible a la petrolera estatal. La segunda investigación es por su presunta intervención en los ascensos de oficiales del Ejército y la Fuerza Aérea.
El Ministerio Público indicó en un comunicado la noche del martes que la fiscal general Zoraida Ávalos suspendió cualquier diligencia investigativa hasta que concluya el mandato presidencial en 2026. Los presidentes en Perú no pueden ser acusados durante su mandato de cinco años, según la ley.
La primera ministra Mirtha Vásquez dijo que se deben hacer “todas las investigaciones para que se pueda acreditar o disipar cualquier tipo de irregularidad que haya existido”.
Añadió que Castillo ha manifestado su disposición a levantar su secreto bancario y de sus comunicaciones telefónicas.
Al momento el mandatario no ha manifestado ninguna opinión. Hace una semana fue interrogado por la fiscal general, pero en calidad de testigo, en el caso de los ascensos de militares.
Al finalizar esa diligencia Castillo negó cualquier indicio de corrupción y dijo que tenía la “conciencia limpia“.
En cinco meses de gestión Castillo ya afrontó un pedido de vacancia presidencial impulsado por la oposición legislativa que no avanzó por falta de votos.
El mandatario no ha concedido ninguna entrevista a la prensa ni ha explicado con detalle las acusaciones en su contra. Castillo empezó su gestión el 28 de julio y según la ley debe concluir en 2026.
Fiscalía interroga al presidente de Perú
El presidente de Perú, Pedro Castillo, declaró tener la conciencia limpia y dar la cara, tras ser interrogado ayer por la Fiscalía como testigo en el caso de los presuntas interferencias ejercidas sobre los ascensos de las Fuerzas Armadas para promocionar irregularmente a militares de su círculo cercano.
“Nosotros damos la cara, no huimos del país, menos nos refugiamos en una embajada; tenemos la conciencia limpia, actuamos conforme a ley y los compromisos asumidos con el pueblo”, escribió el jefe de Estado en su cuenta de Twitter.
El mandatario agregó que, cumpliendo con su deber constitucional, recibió en el Palacio de Gobierno a los representantes de la Fiscalía ante quienes respondió “en condición de testigo, todas las preguntas sobre los ascensos de las Fuerzas Armadas, como parte de la indagación preliminar que realiza el Ministerio Público”.