Santo Domingo.- La Fundación Institucionalidad y Justicia, Inc. (FINJUS) expresa su alta preocupación ante el llamado del Colegio Médico Dominicano (CMD) y el Consejo de las Sociedades Médicas Especializadas (CSME) de paralizar los servicios de salud que prestan a los afiliados de una reconocida ARS del país, y que pretenden hacer efectivo desde el lunes 10 al domingo 16 de mayo próximo, en todo el territorio nacional.
Para FINJUS, la referida medida pone en entredicho la República Dominicana que consagra en su artículo 61 que “toda la protección de la salud de todos los habitantes.
En este mismo sentido la Constitución de persona tiene derecho a la salud integral” y ordena al Estado velar por diferentes leyes protegen este derecho, a fin de garantizar el acceso pleno de la población a los servicios sanitarios, al tiempo que norman el ejercicio de las profesiones del área de la salud.
Dentro de esa normativa se destacan la Ley Núm. 42-01, Ley General de Salud; la Ley Núm. 87-01, del Sistema Dominicano de Seguridad Social; al igual que los reglamentos, resoluciones, normas y circulares emitidos por los órganos que conforman el Sistema Dominicano de la Seguridad Social.
Estas leyes ordenan a las ARS, garantizar que la gestión de la salud sea eficiente, oportuna, satisfactoria y de calidad, mediante la correcta administración y supervisión de la red de Prestadoras de Servicios de Salud, coordinadas por a la Superintendencia de Salud, en base al artículo 172 de la Ley 87-01.
La Ley 87-01 ha establecido asimismo un conjunto de principios rectores y mecanismos que buscan garantizar que las diferencias que puedan generarse entre los distintos actores sean dirimidos en el CNSS y Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales, para que la resolución de dichos conflictos se haga de manera eficiente y evitando que en esos procesos no resulten afectados los afiliados.
Para FINJUS el conflicto que se ha generado tiene que ser resuelto en el marco de los principios, procedimientos y mecanismos que establece la normativa del sector salud, sin poner en riesgo la calidad, el alcance y la naturaleza de los servicios que se prestan a la población.
El llamado a paro que han planteado el CMD y la CSME se realiza en el marco de los graves efectos de la pandemia por COVID-19 que afecta al país y contra pone con los esfuerzos e iniciativas en marcha desde el Estado y la sociedad para alcanzar una pronta recuperación de la crisis sanitaria y económica presente.
FINJUS reitera el llamado a la sensatez y la cordura para realizar los diálogos que sean necesarios en busca de una soluciones racionales y factibles, y exhorta a las asociaciones médicas convocantes a dejar sin efecto el paro anunciado, que constituye una acción inadecuada, inoportuna y carente de sentido legal.