Hasta hace algunos días hubo un virtual nexo entre el Partido Revolucionario Moderno y la Fuerza del Pueblo, conocido desde la alianza para las elecciones presidenciales y congresuales del 5 de julio.
Desde entonces, esa relación se mantuvo hasta hace tan solo pocos días, pero la situación ha comenzado a cambiar luego que la Junta Central Electoral declarara al PRM y al Partido de la Liberación Dominicana como las únicas organizaciones mayoritarias.
En el litoral de la Fuerza del Pueblo se atribuye a sectores del PRM tener alguna vinculación en la resolución de la Junta que perjudica al partido que lidera al expresidente Leonel Fernández.
A parte de no recibir los fondos como la tercera fuerza mayoritaria, el partido de Fernández sería también afectado por la reducción de la asignación del Estado al margen de lo estipulado por las leyes de Partidos y Electoral.
La práctica de Fernández y la Fuerza del Pueblo fue mantener el respeto hacia el gobierno, pero el discurso ha cambiado desde el martes cuando el exmandatario hizo el emplazamiento a la administración de Luis Abinader a que explique su plan de vacunación, en virtud de que las farmacéuticas no podrán suplir dosis comprometidas para combatir el Covid-19.