SANTO DOMINGO.– Con el grito al cielo y sin idea de qué hacer para cubrir la inversión en alimentos y medicina, Rodolfo Pichardo, productor porcino, lamenta la pérdida millonaria que le ha dejado la muerte de 110 cerdos por fiebre porcina.
El productor de Monte Cristi cuenta que esa zona fue de las primeras en ser impactadas por la peste y al no saber manejar la crisis sanitaria y ser solo identificada como una simple neumonía, el virus se expandió provocando la muerte de más de 3, 000 animales en esa demarcación.
“Ahora no sé qué hacer, invertí en la producción en granja de cerdo más de un millón de pesos, mediante crédito a través de la banca y todos se me murieron, solo quede con las deudas y el trabajo perdidos”, apunta el joven emprendedor al indicar que su deuda asciende a más de 300 mil pesos.
Al igual que Pichardo cientos de productores están con la mano en la cabeza lamentando la pérdida de su única fuente de ingresos, tal es el caso de Celeste Núñez productora de patio quien cuenta que su único medio de subsistencia es la crianza de cerdo.
“Solo veo dinero en mis manos cuando vendo un marrano, lo cual usó para comprar alimentos y medicinas”, manifestó la dama a EL DÍA.
Mientras dicha situación mantiene en alerta a los productores organizados quienes han aplicado protocolo de bioseguridad en cada granja, evitando entrada y salida de otras granjas como del personal.
Así explicó Luis Brache, presidente de la Asociación Dominicana de Granjas Porcinas (Adogranja) al indicar que la situación es catastrófica en el futuro de la sanidad, aunque en las granjas organizadas aún no ha entrado la peste, pero si están alerta porque si entra a las granjas las pérdidas serán millonarias.
Señaló que en el mercado nacional maneja 120 mil toneladas métricas de carnes de cerdo de los cuales 30% es importado y se manda 100 mil de animales al matadero.
“La preocupación es la merma en la demanda, la gente por miedo y dejado de consumir pero esta es una enfermedad que no se transmite al humano”, apuntó Brache.