Fenómenos naturales pusieron a prueba capacidad Gobierno

Fenómenos naturales pusieron a prueba capacidad Gobierno

Fenómenos naturales pusieron a prueba capacidad Gobierno

El servicio de energía eléctrica se vio duramente afectado con el paso del huracán Fiona en la región Este. josé de león

SANTO DOMINGO.-Mientras los dominicanos comenzaban a percibir una ligera reducción de la inflación provocada por la guerra entre Rusia y Ucrania gracias a las medidas adoptadas por el Gobierno, un fenómeno atmosférico puso al desnudo los altos niveles de vulnerabilidad de las viviendas en la región Este del país.

El huracán Fiona impactó a la República Dominicana el pasado 19 de septiembre, dejando daños en la agricultura, el turismo, el servicio eléctrico, agua potable, vías y afectando las viviendas de miles de familias alrededor de 12 provincias.

Miles de familias fueron afectadas por Fiona y recibieron las ayudas de las autoridades.

Ante el paso inminente del fenómeno el presidente de la República, Luis Abinader, suspendió su viaje a Nueva York para participación en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), para dar seguimiento a los efectos del huracán.

Mientras Fiona continúa su paso por el territorio, Abinader designó áreas de responsabilidad a funcionarios de su gabinete, quienes debían hacer los levantamientos y canalizar las ayudas.

Decreto
Tras el huracán abandonar el territorio dominicano, el Gobierno emitió el Decreto 537-22, mediante el cual facilitó bienes y servicios de emergencia para dar respuestas en las provincias La Altagracia, Monte Plata, Hato Mayor, La Vega, María Trinidad Sánchez, La Romana, Samaná y El Seibo.

Como parte de las respuestas del Gobierno dirigidas a las provincias afectadas por los daños que dejó Fiona, 21 instituciones estatales involucradas en las diferentes áreas abrieron 66 procesos de compras por RD$19,047,447 067, de los que 52 fueron adjudicados y celebrados, mientras que se hicieron 306 contratos que ya superan los 10 mil 116 millones de pesos.

Un vehículo fue arrastrado por cañada en noviembre 4.

Debido al gran número de viviendas que resultaron afectadas, en su gran mayoría en zonas vulnerables, la madera y el zinc fueron los principales protagonistas dentro de las ayudas llevadas a las áreas afectadas.

Según datos del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, para la adquisición de materiales que se utilizaron en la reparación de viviendas afectadas, la Comisión Presidencial de Apoyo al Desarrollo Provincial abrió varios procesos por un monto estimado de RD$159,184,125.00.

En el proceso se adjudicaron 62 millones 185 mil 761 pesos por la venta de 20 mil tablones de madera de pino bruto 1x10x14 a 721 pesos la unidad, para un total de RD$17,005,452, con impuestos por RD$2,594,052; otros 20 mil tablones de pino bruto 1x10x16 a 823 pesos cada uno y un total de RD$19,424,452, entre otros tipos de madera.

En la adquisición de alimentos para elaborar raciones crudas por parte de los Comedores Económicos, se destinó un monto de 52 millones 400 mil pesos para comprar productos comestibles.

Lluvia
Sin embargo, el huracán Fiona no fue el único impacto de la naturaleza que experimentó la ciudadanía durante este año.
El 4 de noviembre, durante cuatro horas cayeron alrededor de 245 mm de agua por cada metro cuadrado del Distrito Nacional, provocando inundaciones urbanas, cobrando la vida de al menos ocho personas y daños a más de 800 vehículos.

Como respuesta, el Gobierno anunció un programa de ayuda para auxiliar a los propietarios de vehículos, con seguros de ley y los denominados full que no tienen cobertura contra inundaciones, la cual será hasta 100 mil pesos, dependiendo de la evaluación de los daños.

El 22 de diciembre, el Gobierno inició los pagos a los propietarios de los vehículos afectados por la inundación, quienes depositaron los documentos requeridos dentro del plazo establecido.

Vulnerabilidad

— Viviendas
Según estimaciones de organismos internacionales, más de un millón de viviendas se encuentra en lugar de riesgo en la República Dominicana, lo que coloca en situación de vulnerabilidad a las familias que viven en ellas.



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