Santo Domingo.-El escritor Federico Henríquez Gratereaux recibió anoche el Premio Nacional de Literatura 2017, otorgado por el Ministerio de Cultura y la Fundación Corripio, en un acto celebrado en la sala Eduardo Brito del Teatro Nacional.

Henríquez Gratereaux fue escogido el pasado 26 de enero por un jurado compuesto por rectores de seis universidades del país, además del presidente de la Academia de la Lengua Moderna y representaciones del Ministerio de Cultura y de la Fundación Corripio.

El premio que se entregó en su edición número 27 está acompañado de un diploma y un millón de pesos.
El galardonado agradeció al jurado por el reconocimiento y señaló que su primer libro estuvo dedicado a estudiar la sociedad, el cual tuvo como título “Un ciclón en una botella”, calificado por el autor como problemas muy grandes para meterlos en las páginas de un breve libro.

“Aunque fue el primero en ser escrito, apareció después de la “Feria de las ideas”. En este segundo libro el tema central fue el pensamiento y la poesía en lengua española. Me interesaban los pensadores españoles que no escribieron sus obras en latín, como Unamuno, Ortega y Julián Marías”, indicó.

Hizo reseña de la columna que escribe de lunes a sábado en el matutino “Hoy”, titulada “A pleno pulmón”, precisando que en los últimos años ha consumido más de tres mil páginas.

“El periodismo es una forma lícita de ganarse la vida que han tenido muchos escritores. En este caso, puedo decir que “A pleno pulmón” ha sido, primeramente, un servicio público de carácter intelectual y cultural, como lo es mi programa de televisión “Sobre el tapete”, con treinta años en el aire”, sostuvo.

Henríquez Gratereaux puntualizó que nada de eso hubiese sido posible por tantos años sin el concurso permanente de toda su familia, del cual dijo se ha beneficiado siempre.

El asesor de la Fundación Corripio, José Alcántara Almánzar, resaltó que para los miembros de esa entidad es motivo de sentirse complacidos que el máximo galardón que se entrega en el país a un hombre o mujer de letras haya recaído este año en Federico Henríquez Gratereaux, “un intelectual de múltiples facetas, como el periodismo, el ensayo y la narrativa”.

Escritor de altos quilates

Lo definió como un escritor de altos quilates, dueño de una prosa cultivada y elegante, además de ser un infatigable comunicador cuyos méritos se acrecientan cuando ‘comprobamos que para él lo más importante ha sido escribir y reflexionar acerca de la idiosincrasia nacional, sus caracteres y vicisitudes’.

El Premio Nacional de Literatura fue establecido por el decreto 1053-00 por el Poder Ejecutivo y ha sido entregado a 21 escritores dominicanos. Cada año la ceremonia de entrega se celebra de manera abierta en el Teatro Nacional, donde acuden personalidades de diferentes ámbitos de la vida nacional.

Este año la mesa de honor, además del galardonado, estuvo integrada por la vicepresidenta Margarita Cedeño, el ministro de Cultura, Pedro Vergés; José Luis Corripio Estrada, presidente de la Fundación Corripio; José Alcántara Almánzar, Jorge Tena Reyes y María José Rincón.