Por: Goidy Reyes
Dajabón.- A parte de seguir con la construcción de un canal para desviar las aguas del río Masacre, los haitianos están extrayendo miles de quintales de arena del afluente.
Por el sector La Sal y los Cartones en Dajabón se puede observar como haitianos bajan al río Masacre con cubetas para extraer la arena, misma que amontonan a la orilla para luego montarla en camiones para retirarla de la zona.
A pesar del gran daño ambiental que los haitianos ocasionan al río masacre donde afectan la biodiversidad, la turbidez del agua, los niveles freáticos, el paisaje entre otros agravios, la inestabilidad política, la crisis e inseguridad por la cuál atraviesa el vecino país de Haití, imposibilita el trabajo de las autoridades ambientales para preservar el afluente.
“Han entrado en una extracción indiscriminadamente de los agregados del río Masacre, eso es uno de los crímenes más grandes que tenemos en estos momentos y el Ministerio de Medio Ambiente debe rápidamente ponerse en contacto con sus homólogos de Haití para poder preservar el afluente”, así expresó el exgobernador de Dajabón, Arturo Sosia.
El dirigente comunitario Héctor Valerio pidió al gobierno que no solo se enfoque en la construcción del canal que realizan en Juana Méndez, sino que también presten atención a la extracción de arena para que el río no se seque por completo.
Se recuerda que el río Masacre nace en el municipio de Loma de Cabrera de la provincia de Dajabón y desemboca en la Bahía de Manzanillo de la provincia Montecristi donde cuenta con una extensión de 55 kilómetros de los cuales sólo 9 forman parte de la frontera con Haití.
Cierre de Frontera
Desde el 6 de septiembre del presente año el gobierno dominicano tomó la decisión de cerrar la frontera norte del país, medida que fue agudizada el pasado viernes 15 dónde se implementó el cierre marítimo, terrestre y aéreo por la construcción de un canal en Juana Méndez-Haití mismo que conectarán con el río masacre para desviar su agua.
En la construcción del canal los haitianos trabajan día y noche para finalizar la obra, mientras que según el gobierno dominicano hasta tanto la misma no sea paralizada continuará el cierre total dispuesto por el presidente Luis Abinader, por considerar la obra ilegal.
