Tegucigalpa.– El expresidente de Honduras Manuel Zelaya dijo este martes en Tegucigalpa que es falso que haya recibido en 2006 2 millones de dólares de un narcotraficante hondureño que enfrenta juicio en Estados Unidos, como dio a entender el lunes un medio impreso local.
En una rueda de prensa, Zelaya, acompañado por varios diputados del Partido Libertad y Refundación (Libre), dijo que la versión “falsa” que ha sido difundida es “un asunto en primer orden mediático” y la calificó de “muy mal efecto para el concepto de libertad de expresión y veracidad en la libertad de expresión” por parte del rotativo.
La publicación destacó en portada que el narcotraficante “Don H (Héctor Emilio Fernández) pagó 2 millones de dólares al presidente de Honduras en 2006”, citando al expresidente Zelaya, a partir de una versión del Tribunal del Distrito Sur de Nueva York.
El expresidente, coordinador general de Libre, primera fuerza de oposición, recalcó que al leer toda la información del ente judicial estadounidense, en ninguna parte Fernández dice que le pagó dinero a él, por lo que considera que se trata de una “manipulación perversa».
Añadió que este martes se ha querido aclarar a medias la versión falsa con una declaración suya en la que rechaza haber recibido dinero de Fernández, acompañada de la siguiente afirmación- “Nunca en mi vida escuché, no conocí de la existencia de Don H y niego haber recibido soborno».
Además, Zelaya mostró unas imágenes sobre las que, según explicó, indican la ruta de las avionetas de narcotraficantes procedentes de América del Sur cuando él era presidente y la que siguieron después de que fue derrocado el 28 de junio de 2009.
Antes, añadió, las avionetas se dirigían desde el norte de América del Sur hacia República Dominicana, pero después la cambiaron para venir directamente a Honduras, porque tiene comunicada toda su región caribeña. Desde entonces, según Zelaya, los narcotraficantes hicieron de Honduras “un paraíso».
El exgobernante también mostró un resumen de un informe de la Oficina de Asuntos Internacionales contra el Narcotráfico y Aplicación de la Ley del Departamento de Estados de Estados Unidos, de 2007, en el que le reconocen que su Gobierno luchaba contra la corrupción y el narcotráfico.
Además, Zelaya de nuevo la emprendió contra el actual presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, quien el lunes, al trascender la versión de que “Don H” le habría pagado 2 millones de dólares al exgobernante, dijo que “nadie puede estar por encima de la ley, caiga quien caiga».
“Yo, más que referirme a un caso en particular, quiero decir que cuando yo estaba en el Congreso Nacional como presidente comenzamos una hoja de ruta que la hemos seguido hasta el día de hoy y la seguiremos”, recalcó Hernández, de quien Zelaya recordó que tiene un hermano (Tony Hernández) preso en Estados Unidos, acusado por narcotráfico.
“Yo decía que aquí solo existen dos caminos para Honduras- el camino bueno y el camino malo, pero en ese camino debemos de tener claridad- primero, sobre estos exfuncionarios que se han mencionado debe de seguirse el debido proceso, no solamente en Honduras, sino que en cualquier lugar del mundo, ese es un imperativo”, dijo el presidente Hernández.
Zelaya subrayó que “nadie puede juzgar” su “conducta que es pública desde hace 40 años” y que por eso le “extraña la información” difundida y la “manipulación”, de lo que acusó a Hernández.
Añadió que aunque siempre ha respetado a los medios de comunicación, de los que dijo que la mayoría lo atacan, ahora tien “el derecho a reclamar”, porque en la publicación del lunes a él no lo menciona el narcotraficante, sino el fiscal.
Expresó que está dispuesto a presentarse ante la Justicia de Estados Unidos para demostrar que nunca ha estado implicado en narcotráfico. Zelaya dijo además que a los miembros de su familia también se les ha querido involucrar en acciones ligadas al narcotráfico, entre ellos a un hijo suyo y un hermano.
Uno de los hijos del expresidente, Héctor Zelaya, quien lo acompañó en la rueda de prensa, indicó que lo han “difamado”, y, “rotundamente” negó que se haya reunido o que pueda tener alguna relación con un narcotraficante.
Entre otras cosas, Zelaya expresó que cuando fue presidente tuvo “presiones” para los nombramientos de sus ministros y viceministros por parte del entonces embajador de Estados Unidos en Tegucigalpa, Charles Ford.
Para cada cargo, la embajada le hacía llegar “tres opciones”, dijo Zelaya, quien además afirmó que tuvo “presiones” en el mismo sentido por parte de la empresa privada, las iglesias, pastores, militares, sectores políticos y de la sociedad civil.