Al acercarse los días de la Semana Santa, muchas personas aprovechan la oportunidad para visitar y disfrutar de montañas, playas, piscinas, ríos y otros balnearios, por lo que es importante conocer algunos puntos acerca del cuidado de la piel, que permitirán disfrutar al máximo sin nada que lamentar.
Carmen Luisa Pepén de los Santos, dermatóloga de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat), afirma que si bien es cierto que el sol aporta muchos beneficios a la piel, por estimular la producción de vitamina D, una hormona esencial para el cuerpo, con la exposición de 10 a 15 minutos por día.
Hoy está demostrado que este tiene efectos acumulativos en nuestra piel y que en exceso se traduce en cambios y manchas, envejecimiento prematuro y desarrollo de cáncer.
Es por esto que tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Academia Americana de Dermatología y las sociedades dermatológicas especializadas a nivel mundial, hacen recomendaciones todos los años para los días de verano, que es donde es mayor la exposición, detalla la especialista.
Pepén dice que es importante que las personas no se expongan a sol en las horas de mayor exposición, o sea de las 10 de la mañana a las cuatro de la tarde, ya que es en estas donde los rayos solares inciden con más fuerza y por ende sus radiaciones son más agresivas, por lo tanto se deben aprovechar las sombras en esas horas, mantenerse bajo techo o hacer uso de toldos, sombrillas o bajo la protección de los árboles.
La especialista señala que se debe tomar en cuenta que algunas superficies como el agua, la arena, el pavimento, el pasto y la nieve, retienen y reflejan los rayos solares y generan un efecto lupa en la piel, duplicando o triplicando el daño aún más que la exposición directa al sol.
La dermatóloga exhorta a recordar el uso de ropa adecuada, prendas de vestir holgadas y de tejido tupido, preferiblemente que tengan factor de protección contra los rayos ultravioleta, sombreros de alas anchas mayor de siete pulgadas para la protección óptima de los ojos, orejas, cara y la parte posterior del cuello.
Si decide el uso de una gorra o víscera, debe tener pendiente la replicación del protector solar en orejas y parte posterior del cuello.
También es importante que sepa que los lentes de sol con adecuada cobertura a UVA y UVB reducen considerablemente la posibilidad de daños oculares debido a radiación solar.
Hidratación
Pepén enfatiza que un punto fundamental en el cuidado de la piel estos días es la adecuada hidratación. Se recomienda aumentar la ingesta de agua natural de dos a tres litros al día, agua de coco o jugos naturales con bajo contenido de azúcares, importante, no cuentan refrescos, ni bebidas alcohólicas ya que este tipo no sustituye el agua.
“Algunos pacientes llegan al consultorio con la interrogante de que si es recomendable el bronceado, a lo cual respondo que no, pues ha sido demostrado que el uso indiscriminado de productos para ese tipo de procesos, así como las camas y lámparas de bronceado aumentan la posibilidad de aparición de cáncer de piel”, plantea al referirse al tema.
La experta manifiesta que algo que no se debe olvidar, ni pasar por alto, son los niños y envejecientes, ya que son una población muy vulnerable a los riesgos ambientales.
Nunca lo olvides
Hay que tener presente replicarles el protector con los productos adecuados para niños y, en el caso de los más adultos, una loción fluida o mineral para pieles sensibles, en caso de bebés menores de seis meses mantenerlos protegidos y bien cubiertos en la sombra, ya que por su tipo de piel no se usa ningún producto, la recomendación es evitar la exposición.
La Sociedad Dominicana de Dermatología año tras año hace campañas para orientar, concientizar e inducir la adecuada protección solar de la población general durante estas fechas.
Concluye diciendo que este año la campaña que promueven es “No te pases con el so”.
Recomendación
En caso de sobreexposición al sol y aparición de lesiones y quemaduras, haz uso de soluciones postsolares o gel de aloe y acude a un dermatólogo de confianza para una evaluación profunda de los posibles daños causados y le prescriba un tiramiento adecuado para usted.