
SANTO DOMINGO.- La falta de estimulación en el primer año del bebe puede ocasionar leves consecuencias en el aspecto psicológico, emocional y social, que pueden quedar evidenciados en diversos tipos de estancamientos durante su crecimiento.
De acuerdo a la Psicóloga Escolar Pierina Ferreras Caprettini, esta consiste en la estimulación de todos los sentidos mediante actividades significativas donde el niño explorará y descubrirá libremente y contribuye al primer elemento sobre el que se construye todo tipo de aprendizaje.
La experta refiere que genera diversos beneficios debido a que favorece la adquisición de nuevos aprendizajes, promueve la comunicación no verbal, estimula el pensamiento lógico, mejora la coordinación y la concentración y les ayuda a aceptar estímulos de su entorno.
La mejor etapa
Al hablar de la importancia de aplicarse a temprana edad, en el período de 0 a 3 años, destaca que el éxito futuro de un ser humano tiene su base en los primeros años de desarrollo.
“Es en esta edad, donde su cerebro presenta una mayor disposición para recibir estímulos que favorecerán su socialización, creatividad y aprendizaje”, sostiene.
Ferreras Caprettini, quien trabaja el desarrollo integral y atención temprana de los niños a partir de los 3 meses de edad, en el centro de desarrollo SENSI, asegura que el periodo prenatal y el posnatal son etapas críticas de desarrollo estructural y funcional del sistema nervioso.
Por ello recomienda introducir al niño desde los tres meses, siendo más eficaz porque el desarrollo neuronal tiene mayor plasticidad y, por lo tanto, cualquier evento positivo o negativo durante este periodo repercute de manera relevante sobre el desarrollo del cerebro.

Etiquetas
Erika Rodríguez
Periodista, ganadora del Premio Nacional de Periodismo Turístico Epifanio Lantigua en la categoría Gastronomía y Turismo.