
Memphis.- Estados Unidos rendía tributo este miércoles a Martin Luther King, el ícono de la lucha pacífica contra la desigualdad racial, asesinado hace 50 años en Memphis (Tennessee) por un segregacionista blanco, una disputa aún relevante.
El 4 de abril de 1968 a las 18h01, el pastor negro recibió un disparo mortal en el balcón de un motel en Memphis, donde había llegado a apoyar a los recolectores de basura en huelga.
Su muerte, a la edad de 39 años, desencadenó disturbios en varias ciudades estadounidenses importantes. Cincuenta años después, varios actos deben honrarlo: en Washington, alrededor de la estatua en su memorial en la mañana y también en el Motel Lorraine, en Memphis, ahora convertido en un museo, en el momento exacto en el que fue abatido.
En Memphis, "habrá muchas cosas esta semana, la ciudad mostrará su mejor cara", dijo el reverendo Jesse Jackson, un prominente activista por los derechos civiles en Estados Unidos que estuvo presente en Memphis junto al pastor King.
