Como quien no quiere la cosa, ayer se dio una noticia aparentemente rutinaria, pero con un alto contenido político.
Y no me refiero al conflicto desatado dentro de las filas del PRD, explosivo de por sí, sino al anuncio de que el PLD habrá de oficializar dentro de apenas once días los nombres de quienes serán sus precandidatos presidenciales.
Todo el mundo ya sabe de las aspiraciones de Danilo Medina, José Tomás Pérez, Franklin Almeyda, Radhamés Segura y Francisco Domínguez Brito. Se habla también, un poco ambiguamente, del vicepresidente Rafael Alburquerque.
Pero ¿y qué me dicen de Leonel Fernández? ¿Y de Margarita Cedeño?
Ahí está, precisamente, la importancia del anuncio. Si en el listado de precandidatos que habrá de elaborarse dentro de once días en el PLD no aparece el nombre de Leonel, habrá que deducir que fue su decisión no buscar la reelección. Pero si aparece, tendría entonces que echar el pleito con los que sostienen que una nueva reelección es inconstitucional.
Una cosa es cierta: si Leonel no va, el que vaya tiene que contar con su apoyo.
Desde luego, estoy especulando. Lo único cierto es que, dado el lío que se está armando en el PRD y las expectativas que se presentan dentro del PLD, lo que viene por ahí es un camino escabroso antes de que podamos salir a lo claro.