Santo Domingo.-El cantautor Erol Díaz nace de la incesante necesidad de expresar sus ideas y compartirlas a través del lenguaje de la música, por esos sus canciones son una reflexiva invitación desde lo simple, para alcanzar la nación que soñamos.
El artista, nativo de Santiago, se define como un ser humano con anhelos, sueños, ilusiones y que se le da más o menos bien llevar al papel sus pensamientos para convertirlos en canciones que toquen el alma y dejen en quienes las escuchan un mensaje positivo.
Músico y profesional
Entre música y profesión, Erol Díaz, cuyo nombre verdadero es fausto, divide su tiempo entre la música y su carrera profesional.
“Mis mayores retos en estos momentos son: primero, el desarrollar un quehacer artístico con el poco tiempo que dispongo, porque el 95 por ciento de mi tiempo está dedicado a mis labores profesionales como psicólogo docente y terapeuta infantil.
Y segundo, emplearme a fondo en una propuesta musical diferente al rumbo que han tomado las letras y la música hoy en día… Pero me reconforta saber que estoy haciendo lo que decía el pensador Confucio: “Encendiendo una vela, en vez de maldecir la oscuridad”.
“Mi propia Reforma”
Erol Díaz escribió su tema “Mi propia Reforma” en el año 2006, cuando se inició el proceso de consulta para la reforma a la Constitución en el 2010, ahora nuevamente a propósito de la anunciada reforma fiscal ha logrado calar en el gusto de la gente, el tema que está en balada, tocado a guitarra, será grabado en versión salsa.
A guitarra
“Mi propia reforma, como pieza unitaria, interpretada tal cual fue compuesta de manera orgánica y simplemente a guitarra y compartirla en los distintos medios a dónde soy invitado, ha logrado llevar el mensaje que quiero transmitir sobre la necesidad de someternos a verdadera reforma como seres humanos y como dominicanos, promoviendo las buenas costumbres y valores”.
Un recurso
— Tarapeuta infantil
Además de cantar, escribir, componer canciones y tocar guitarra, Erol trabaja como terapeuta infantil, compartiendo y utilizando la música como recurso terapéutico con niños y niñas con discapacidad.
*Por CARMEN LUZ BEATO