Santo Domingo.- El Episcopado Dominicano agradeció al gobierno la eliminación de la medida que prohibía a las iglesias la realización de actividades y reuniones, a través la modificación del decreto 740-20.
Dichas medidas habían sido impuestas como parte de los recursos de prevención contra el Covid-19, pero que como consecuencia despojaba al pueblo creyente de la oportunidad de congregarse a escuchar la palabra de Dios, y así mantener y aumentar su fe ante la difícil situación.
En el comunicado se informó acerca del papel fundamental que cumple la iglesia en la vida de las personas, “más aún en estos tiempos difíciles donde la fe ha sido uno de los recursos en los que el pueblo se ha apoyado para salir adelante”.
El Episcopado resaltó que desde el ámbito de la fe, a miles de personas se les ha ofrecido una acogida y un acompañamiento espiritual a fin de que superen la depresión, el desaliento, la desesperanza, la frustración, la angustia, la ansiedad y hasta la inconformidad con la vida misma¨.
Informó que ante la nueva noticia de permitir a las iglesias celebrar sus reuniones con el debido distanciamiento y medidas sanitarias, se seguirán realizando los protocolos de higienización entre los feligreses, tales como mantener distancia, el uso de mascarillas, gel y/o alcohol como desinfectantes para manos y calzados.
Al mismo tiempo, le sugirieron a los gobernantes que antes de tomar este tipo de medidas tan drásticas que puedan llegar afectar la fe de la gente, se socialice acerca de las mismas con los representantes del pueblo de Dios
*Por Lisbeth Báez