La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), es una condición pulmonar heterogénea caracterizada por síntomas respiratorios crónicos como sensación de falta de aire, tos, producción de esputo o secreciones, acompañada de anormalidades en las vías aéreas como la bronquitis o el enfisema que causan obstrucción al flujo aéreo o entrada de aire de manera progresiva y persistente.
Ángela Araujo, neumóloga-internista de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat), advierte que la EPOC no es solo tos y falta de aliento, realmente se trata de una enfermedad potencialmente mortal que, si no es tratada a tiempo, conduce de forma progresiva a la muerte. Es la tercera causa de muerte en el mundo. En 2019 ocasionó 3,23 millones de defunciones.
Casi el 90% de las muertes por esta patología en menores de 70 años se producen en países de ingresos medianos y bajos.
El principal factor de riesgo para el desarrollo de esta enfermedad es el consumo de cigarrillo o tabaco, otros factores de riesgo son la inhalación de partículas y gases tóxicos, exposición a humo de leña o carbón y causas genéticas menos frecuentes como el déficit de alfa 1 anti-tripsina, detalla.
“La EPOC no tiene cura, pero su diagnóstico y su tratamiento temprano son importantes para frenar el empeoramiento de los síntomas y reducir el riesgo de que se produzcan exacerbaciones”, dice la especialista.
Araujo explica que debe sospecharse de la enfermedad en una persona que presente los síntomas característicos de esta afección, junto a la valoración clínica e imágenes de tórax.
Pero el diagnóstico se ha de confirmar mediante una espirometría, que es una prueba que mide el funcionamiento de los pulmones. En los países de ingresos medianos y bajos no suelen tenerse medios para realizar esta prueba, por lo que la enfermedad se diagnostica de manera deficiente. En nuestro país contamos con esta herramienta para el diagnóstico de dicha enfermedad.
Tratamiento
Hay distintos tipos de medicamentos, que inhalados, pueden ayudar a reducir los síntomas y prevenir las exacerbaciones. Debido a que tienen diferentes mecanismos de acción, pueden administrarse en un solo inhalador que contiene varios fármacos.
Estos medicamentos, llamados broncodilatadores ensancha las vías respiratorias y se pueden usar regularmente para prevenir o reducir los síntomas y para aliviarlos durante las exacerbaciones agudas. Araujo señala que para inhalar estos medicamentos se debe usar una técnica adecuada y, en algunos casos, una cámara de inhalación que facilita el paso de los fármacos a las vías respiratorias.
En muchos países de ingresos medianos y bajos, la disponibilidad de estos medicamentos es limitada.
Es preciso ofrecer a las personas con EPOC información sobre la enfermedad, su tratamiento y los cuidados personales que deben seguir para mantenerse lo más activas y en forma posible, enfatiza la especialista.
Neumonía y EPOC
En los pacientes con EPOC, las neumonías son frecuentes, y contribuyen a la hospitalización y a la mortalidad de los afectados. Al mismo tiempo, más del 30% de las personas con esta complicación que requieren ingreso hospitalario tienen EPOC, y hasta el 50% en las neumonías graves que precisan ingreso en una unidad de cuidados intensivos tienen dicha enfermedad.
Vulnerables
Asimismo, la profesional dice que los pacientes con esta enfermedad tienen más riesgo para desarrollar una neumonía por diferentes causas. Las más importantes están en relación con la propia gravedad de la obstrucción al flujo aéreo y también por la frecuente colonización crónica con bacterias en las vías aéreas inferiores presente en estos pacientes.
Esta colonización persistente viene facilitada por la existencia de la inflamación crónica en las vías aéreas, característico de la EPOC, que se produce básicamente por tres factores: La alteración de la mucosa traqueobronquial, que provoca alteración en la limpieza normal de los pulmones; el aumento de la adhesividad de los gérmenes al tejido respiratorio y las alteraciones existentes en el sistema de defensa o inmunológico.
EPOC y cáncer pulmón
Por otra parte, el cáncer de pulmón es otra enfermedad respiratoria frecuente en estos pacientes, ya que las causas principales están asociadas estrechamente una de otra.
No solo el tabaco, sino que la inflamación crónica, cambios en el ADN y defectos en la reparación celular además de la susceptibilidad genética.
Cabe destacar que el cáncer de pulmón es la principal causa de muerte por enfermedad maligna en todo el mundo, con más muertes que el cáncer de colon, mama y próstata juntos, teniendo aproximadamente 1,6 millones de muertes por año en el mundo.
“Desafortunadamente la mayoría de estos cánceres de pulmón son diagnosticados en fases avanzadas, lo que da como resultado una mala supervivencia, por lo tanto, la prevención primaria, secundaria y detección temprana son de importancia vital para aumentar la supervivencia”, señala.
Medidas preventivas
— Dejar el tabaco
La especialista manifiesta que las medidas preventivas tanto para el cáncer de pulmón como para la EPOC es el abandono del consumo de tabaco.
Recomendación
En pacientes fumadores activos y exfumadores, el grupo de trabajos de servicios preventivos de los Estados Unidos recomienda la realización de tomografía de tórax anual para cribado de cáncer de pulmón.
En este grupo se incluyen los pacientes de 50 a 80 años fumadores activos y hasta 15 años luego del abandono del hábito.
También se incluyen pacientes con exposición a humo de cigarrillo de segunda mano, pacientes con exposición a humo de leña o de carbón, exposición a gases contaminantes como el radón, amianto y antecedentes familiares de cáncer de pulmón.