Santo Domingo.-El gobierno de Hipólito Mejía fue el único período en el cual no fue modificada ninguna obra a favor de la constructora Odebretch, de acuerdo a un estudio realizado por el economista José Rijo Presbot.
El estudio fue realizado a partir de datos publicados en la Gaceta Oficial de los contratos sancionados por el Congreso Nacional entre el Estado dominicano y la Constructora Norberto Odebrecht y sus asociados dominicanos.
El proyecto del acueducto de la Línea Noroeste fue firmado en 1999 por el ingeniero Manuel de Jesús Pérez Gómez, en su calidad de director del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA), mediante Poder Especial No. 166-99, emitido por el entonces presidente de la República, Leonel Fernández.
Al ser entrevistado en el matutino Uno+Uno, el también analista presupuestario explicó que la firma del contrato original se hizo con el Consorcio Acueducto Noroeste, integrado por las firmas Constructora Andrade Gutiérrez, S.A e Hidráulica Agrícola y Civil C. POR A. (HAYCIVILCA), por un monto estimado de 2 mil,563 millones de pesos, que convertidos a la tasa de cambio fija de entonces, equivalente a RD$15.85 por US$1, alcanzaba la suma de 161 millones de dólares.
Indicó que ese proyecto, al ser sometido al Congreso Nacional por el Senado de la República, fue rechazado y devuelto al presidente Fernández Reyna el 11 enero del año 2000.
Al llegar Hipólito Mejía se retoma el proyecto del acueducto de la Línea Noroeste y luego de varios estudios la empresa Constructora Norberto Odebrecht presenta una modificación al contrato original que ya poseía Andrade Gutiérrez y se baja a un monto de 141 millones.
El documento precisa que los 20 millones de dólares de diferencia se destinaron al Contraembalse de Monción y a los acueductos de Las Canas – Emagas – Las Guáranas; San Rafael del Yuma, Los Naranjos, Loma de Cabrera, Villa Altagracia y Cabrera.
“No es hasta el 2005, con el retorno a la presidencia de Leonel Fernández y a INAPA del ingeniero. Víctor Díaz Rúa, que mediante una adenda se incrementa el Acueducto de la Línea Noroeste en 89,9 millones de dólares”, afirmó.
En cuanto a la otra obra del período 2000-2004, la Hidroeléctrica Pinalito, que no se llegó a ejecutar en el Gobierno de Hipólito Mejía, Rijo precisó que el costo total del proyecto era de 131.7 millones de dólares, con un desglose de 112.2 millones de dólares para equipos y obras directas pagados a Odebrecht, 5.0 millones de dólares para reforestación y manejo de cuenca; 0.80 millones de dólares para equipos de construcción, 11.22 millones de dólares como provisión escalamiento e imprevistos y otros; 2.47 millones de dólares estimado de costos de seguros de créditos.
El estudio revela que fue tiempo después, mediante una adenda que se incluyó dentro ese mismo monto una partida para el estudio de impacto ambiental de 1.5 millones de dólares; y el valor de la supervisión de 5.0 millones, de dólares, “es decir, que hubo una disminución de 6.5 millones de dólares del contrato original”.
Rijo Presbot fue enfático al declarar que las modificaciones a este proyecto vinieron después de 2005, en el gobierno de Leonel Fernández, alcanzado un monto de US$361.2 millones de dólares según data la Procuraduría General de la República (PGR) en su solicitud de inscripción de medidas de coerción a los encartados por el caso de sobornos de Odebrecht.
Finalmente, dijo que “en esos dos contratos no se evidencian acciones “indebidas por parte del presidente Hipólito Mejía para favorecer a Odebrecht”.