Despejado el camino para la reelección, el presidente Luis Abinader ya no tiene que justificar cualquier interés que tuviera escondido para buscar otro periodo más allá de 2024.

El Partido Revolucionario Moderno no ha hecho otro cumplido que acatar lo que dice la Constitución sobre dos periodos y nunca más, pero con un objetivo bien claro.

Es decir, que el PRM posterga hasta 2028 cualquier conflicto de apetencias políticas y se aglutine en torno a la figura del presidente Abinader.

Solo un desatinado se atrevería a disputar la candidatura a Abinader, con el alto costo político que esa acción implicaría.

En la oposición
Definido como está el candidato presidencial del PRM, los partidos de la oposición no tienen otro camino que agilizar el paso y estructurar sus procesos internos para escoger a los rivales de Abinader.

De ahí que el Partido de la Liberación Dominicana sería el más presionado por desarrollar un proceso que contribuya a su fortalecimiento interno, ya que por el momento la Fuerza del Pueblo no tiene en el camino ningún conflicto a futuro, porque no postularía una figura diferente al expresidente Leonel Fernández.

Campaña ahora
Por más que se quiera cumplir con la Ley Electoral y la Ley de Partidos, la verdad es que la situación actual obligará a los partidos a intensificar su proselitismo para capitalizar muchos de los problemas sociales y económicos que presionan al Gobierno desde hace varios meses.