El Cairo.- Las pérdidas económicas que Egipto prevé sufrir por la caída del turismo como consecuencia de la tragedia del avión ruso del pasado 31 de octubre alcanzarán los 2.200 millones de libras egipcias (más de 273 millones de dólares o de 254 millones de euros) en un periodo mínimo de quince días y máximo de tres meses.
Esas cifras fueron anunciadas hoy en rueda de prensa por el ministro egipcio de Turismo, Hisham Zazú, según informó la agencia oficial de noticias, MENA.
Las pérdidas estarán provocadas sobre todo por la suspensión de los vuelos a Egipto por parte de Reino Unido y Rusia, hasta que se aclare la causa de la catástrofe aérea.
Ambos países suponen un 66 % del mercado turístico en Sharm el Sheij, de donde partió el avión siniestrado, y un 52 % en Hurgada (también en el de Marzo Rojo), según el ministro.
En esa misma alocución, Zazú anunció que el Gobierno egipcio aprobó un plan para tratar de rescatar el sector turístico de la grave crisis desatada tras la catástrofe aérea sucedida en la península del Sinaí.
Esa iniciativa será financiada con cinco millones de dólares procedentes del Fondo de Turismo, añadió el ministro.
Además, en un gesto para querer mostrar la seguridad en la zona, el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, visitó hoy por sorpresa la localidad de Sharm el Sheij, en su vuelta a Egipto tras participar en la IV Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de América del Sur y Países Árabes (ASPA), celebrada ayer y hoy en Riad.
En declaraciones a la televisión estatal egipcia en el aeropuerto de Sharm el Sheij, Al Sisi subrayó que “Egipto es estable y seguro». “Tenemos gran interés en que todos los visitantes estén seguros, lleguen seguros y se marchen seguros”, añadió el presidente, que insistió también en que “las luces de Sharm el Sheij no se van a apagar».
Además, en relación con el plan anunciado, prometió que las autoridades egipcias van a aumentar sus “esfuerzos” para demostrar que están protegiendo y protegerán aún más el país.
Asimismo, con respecto a las causas de la tragedia, Al Sisi señaló que “no hay que apresurarse ni adelantarse a los resultados de las investigaciones, que serán anunciados en cuanto se reciba el informe de la comisión” encargada del caso.
“No ocultamos nada y si hay un error (por nuestra parte), lo anunciaremos”, prometió. Un avión comercial ruso se desintegró en el aire el pasado 31 de octubre minutos después de despegar del aeropuerto egipcio de Sharm el Sheij, lo que causó la muerte de las 224 personas que iban a bordo de la aeronave, un Airbus A-321.
Varias investigaciones internacionales apuntan a que el siniestro se produjo por una bomba colocada en la bodega de la aeronave por algún fallo de seguridad en la terminal aérea. Las autoridades egipcias no confirman oficialmente esa hipótesis.