*Por Teodoro Tejada
El domingo 3 del corriente mes de enero del recién iniciado año nuevo 2021, se produjo un largo y caótico tapón en el tramo comprendido en el entre las provincias Azua y Peravia (Bani).
El Decreto 740-20 de fecha 30 diciembre 2020, emitido por el Presidente Luis Abinader el cual establece un nuevo horario del toque de queda a partir de 31 de diciembre del pasado año hasta el 10 de enero del año en curso, horario este de 5:00 p.m. a 5:00 a.m., con dos horas de libre tránsito para llegar a sus casas, hasta las 7:00 de la noche, los sábados y domingos hasta el 10 de enero inclusive, el horario vigente del toque de queda es de 12:00 meridiano a 5:00 de la mañana, obviamente esta reducción del tiempo produjo un trastorno todo el fin de semana largo desde el 31 diciembre al lunes 4 de enero.
Esto así dado de que las acciones de políticas públicas deben hacerse planificadas y específicas, con tiempo prudente para su aplicación, las mismas deben estar orientadas a resolver un problema público con coherencia, concreto y metas.
El pueblo dominicano ya tenía planificado sus vacaciones, dado el largo asueto oficial del fin de año. Las razones del gobierno para cambiar las disposiciones, se fundamentó motivado al incremento del contagio del Covid-19, viéndose precisado a variar bruscamente el horario que ya se tenía establecido, al parecer estas medidas no redujeron el contagio ya que, en lugar de bajar, fue todo lo contrario, el aumento produjo cifra record para el 4 de enero de 2,043 personas contagiadas.
Es que el gobierno debe orientar al pueblo con programa de educación, atreves de la radio, la televisión, prensa y redes sociales, para el uso de la mascarilla, el lavado de las manos y el distanciamiento social, como única forma real de evitar el contagio de este coronavirus. Es que el método del confinamiento no ha dado resultado, al contrario, el principal vector del contagio masivo, son los apresamientos de los violadores del horario del toque de queda, ya que estas personas son introducidas a celdas improvisadas de camas de camiones, donde no hay ningún protocolo que evite el contagio, y lo peor es cuando son llevados a celdas comunes.
El presidente de la República, Luis Abinader, admitió este lunes que gran parte de la población y de las autoridades están cansadas de esta lucha contra el COVID-19, pero motivó a todos los dominicanos a hacer un último esfuerzo por la salud de todos. Y siguió diciendo. “Nosotros sabemos que no es fácil y quiero decirles que el país está cansado.
Esto demuestra la gran preocupación y sensibilidad humana del mandatario Abinader por resolver o por lo menos aplanar la curva de contagio. Por lo que el pueblo debe escuchar este llamado del presidente de la república para hacer un esfuerzo para no enfermarnos de covid-19.
La reapertura de la economía y el cambio del actual toque de queda en, se hace imprescindible y necesario.
La población está enfermando más de los trastornos mentales que de coronavirus, ya que el estado de hacinamiento que se vive en los barrios pobres del gran Santo Domingo y del interior del país, es una penosa realidad, que no podemos seguir ignorándolas.
Lo cierto es que no se vislumbran señales que nos indiquen que el control del contagio de la pandemia, las autoridades están haciendo número de pruebas mayores que las prometidas y, aun así, no se vislumbra una merma del contagio.
Ahora bien, es tiempo de prepararnos para esperar vivo y sano que lleguen las vacunas para combatir el covid-19, pero lo del largo taponamiento del sur no se puede dejar pasar por alto.
Hay que decir claramente que el principal problema de este molesto taponamiento, no se debió exclusivamente a la estreches de esta carretera citada anteriormente y su único carriles en ambos sentido de la vía, que hace largos años resulta obsoleta para el gran flujo de vehículos que transitan por esta importante infraestructura vial de la Región Sur, por lo que es necesario una explicación exhaustiva y bien definida de lo que produjo, este nunca antes visto, el ya famoso tapón del Sur por parte del Ministerio de Obras Públicas (MOPC),
El Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT) y el Centro de Operaciones de Emergencias (COE), este último dirigió el operativo de Navidad “Compromiso por la Vida 2020-2021”, esto no puede pasar desapercibido.