Washington.- El “supermartes”, cuando coinciden en un solo día doce primarias estatales para decidir los candidatos presidenciales republicano y demócrata, puede consolidar definitivamente el camino a la nominación del magnate Donald Trump y de la ex secretaria de Estado Hillary Clinton.
Trump, con 82 delegados, el 60% de los apoyos en liza hasta la fecha para la convención del Partido Republicano, podría consolidar, si mantiene el ritmo, su camino hacia los 1.327 delegados necesarios para ser el candidato presidencial en los comicios de noviembre.
Las encuestas dan ventaja a Trump en todas las contiendas estatales de primarias republicanas a excepción de Texas (donde se reparten 155 delegados), y donde el senador Ted Cruz juega en casa y se espera que mantenga su dominio.
Si Trump consiguiera entre 240 y 300 delegados en el “supermartes” quedarían pocas dudas de que el magnate de los casinos y hoteles se proclamaría líder de la formación de cara a las elecciones presidenciales, culminando así una gesta que nadie pensó que fuera capaz con su discurso xenófobo y populista.
El 1 de marzo, martes, se celebrarán primarias y “caucus» (asambleas populares) republicanas y demócratas en Alabama, Arkansas, Colorado, Georgia, Massachusetts, Minesota, Oklahoma, Tennessee, Texas, Vermont y Virginia.
También habrá asambleas populares republicanas en Alaska y Wyoming, y de los demócratas en el territorio de la Samoa estadounidense.
La siguiente fecha que podría consolidar más si cabe el liderazgo de Trump, que solo disputan ya los senadores Marco Rubio y Ted Cruz, sería el 15 de marzo, donde está en juego, entre otros estados, Florida, el estado del que es oriundo Rubio.
Pese a que el “establishment”, los herederos de la política tradicional conservadora con historial político dentro del partido, se ha lanzado a criticar a Trump, el magnate ha capitalizado el descontento y podría protagonizar una coronación histórica en la convención del partido este verano en Cleveland (Ohio).
Rubio ha intensificado los ataques contra Trump en los últimos días y hoy presentó junto a Cruz su declaración de impuestos, para invitar al magnate a que haga lo mismo, a sabiendas de que los negocios de Trump, algunos ruinosos, pueden revelar sorpresas.
Cruz aseguró hoy en una entrevista con NBC que Trump oculta una “bomba” en su declaración de impuestos y que es decisión de los votantes juzgar con el historial fiscal del favorito de las encuestas republicanas en la mano.
En el lado demócrata, que celebra primarias en 11 estados y un territorio de ultramar, están en juegos 865 delegados, con Hillary Clinton como favorita de las encuestas para llevarse una gran parte de ellos.
Clinton llega con el impulso que le dio este sábado su abrumadora victoria en el estado de Carolina del Sur, donde se impuso al senador Bernie Sanders con un 73,5% de los votos, frente al 26% de su rival.
La exsecretaria de Estado dijo este sábado que su campaña va a tomar una dimensión nacional de cara al “supermartes”, pero aseguró que no da nada por garantizado aún.
Clinton ya tiene más de 544 delegados frente a 85 de Sanders, en especial gracias al casi unánime apoyo de los llamados “superdelegados”, votos para la convención demócrata de verano que están vinculados al aparato del partido.
Pese a que la exsecretaria de Estado no ha conseguido ventajas muy considerables en las contiendas de Iowa o Nevada, y a que Sanders se impuso en Nuevo Hampshire, la diferencia de delegados es por el momento favorable a la exprimera dama.
Sanders contó hoy con un espaldarazo importante dentro del Partido Demócrata, con la dimisión de la vicesecretaria de la formación, la congresista por Hawai Tulsi Gabbard, que anunció que apoyará al senador autodefinido como “socialista demócrata».