El “match” que tuvieron el periodista Juan Taveras Hernández y el exsenador Ramón Alburquerque da una clara señal de cómo andan los ánimos con relación a cuál debe ser el trato a Andrés Bautista, el presidente del PRM que guarda prisión preventiva por la acusación de haber recibido sobornos de Odebrecht.
El liderazgo tradicional de ese partido opositor ha decidido respaldar a Bautista a tal nivel que en unas declaraciones lo llegó a describir como un “preso político”.
Hasta han planteado asistirlo en su defensa, aunque él tenga sus buenos abogados, pero esa posición no es del agrado de todos.