La escogencia de los nuevos miembros de la Junta Central Electoral culminó ayer con una votación en la que los senadores de los partidos Revolucionario Moderno y La Fuerza del Pueblo se combinaron para alcanzar las dos terceras partes requerida sin necesitar los votos de los legisladores del Partido de la Liberación Dominicana.
Resultó evidente que las designaciones fueron parte de acuerdos entre el PRM y la FP, dejando de lado al PLD.
Lo que ayer fue una derrota, en el futuro puede generar beneficios políticos al PLD, pues en lo adelante tiene más holgura para hacer oposición.
La nueva Junta deberá lidiar con un PLD crítico y que le dejará pasar pocas, con el agravante de que entre sus miembros no tendrá interlocutores con el principal partido de oposición. Entonces puede decirse que aunque perdió una batalla en el Senado, puede sacarle provecho político en el camino de oposición que ha empezado a recorrer.
La coincidencia de intereses PRM y FP
En este momento el PRM y la Fuerza del Pueblo coinciden en su interés de golpear políticamente al PLD, pero ¿hasta cuándo durará? Es sabido que la intención de la FP es llevar a Leonel al poder en 2024 y la del PRM es preservarlo.