SANTO DOMINGO.- Luego de la muerte del joven Ismael Ureña Pérez, de 14 años, quien falleció después de supuestamente haber recibido una inyección del esteroide veterinario «caballín«, experto advierten el peligro que representa para los humanos estos esteroides anabólicos.
En la búsqueda de mejoras rápidas en el rendimiento deportivo y la apariencia física, algunos jóvenes han recurrido al uso de esteroides anabólicos destinados para animales, como la Boldenona, conocida popularmente como «caballín«. Esta práctica representa un grave riesgo para la salud, especialmente en adolescentes de 14 años, cuyo organismo aún está en desarrollo.
Hablan los expertos
El doctor Rafael Mena, pediatra intensivista neonatal en República Dominicana, advierte sobre los peligros de estas sustancias.
«El uso indiscriminado de esteroides anabólicos puede desencadenar hipertensión en los pacientes, problemas renales, en los ojos y aumento de la glicemia. Aquí debe haber un control», indicó el galeno.
Por su parte, el doctor Richard Medina, especialista en nefrología, quien ha tratado casos de adolescentes con daños renales severos debido al consumo de estos esteroides, dijo que ha «encontrado 15 casos en el último año, solo entre mis pacientes, de adolescentes con daños renales severos, con el denominador común de haber sido expuestos a esteroides para mejorar su rendimiento en el béisbol. Eso es un escándalo.»
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El Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIDA) de EE.UU señala que «los esteroides anabólicos pueden causar daños graves, duraderos y, en algunos casos, irreversibles. Pueden provocar ataques cardíacos prematuros, derrames cerebrales, tumores hepáticos, insuficiencia renal y problemas psiquiátricos.»
Riesgos en adolescentes
El uso de Boldenona en menores de edad puede desencadenar problemas severos, como: detención del crecimiento. La Boldenona puede acelerar el cierre de las placas de crecimiento óseo, impidiendo que el adolescente alcance su estatura adulta potencial.
Alteraciones hormonales: A los 14 años, el sistema hormonal está en un equilibrio crítico. Introducir un esteroide como el «Caballín» puede causar ginecomastia (crecimiento de senos en varones), infertilidad, atrofia testicular y disfunción eréctil.
Toxicidad hepática y renal: La Boldenona está diseñada para animales, y su uso en humanos es altamente tóxico para órganos como el hígado y los riñones, lo que puede llevar a insuficiencia orgánica.
Problemas cardiovasculares: Estos esteroides aumentan el riesgo de hipertensión, niveles elevados de colesterol malo y un mayor riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Consecuencias psicológicas: En adolescentes, el uso de Boldenona puede desencadenar agresividad extrema, ansiedad, depresión y pensamientos suicidas.
El peligro del «Caballín» en manos inexpertas
El problema se agrava cuando la sustancia es adquirida en el mercado negro, donde no existen controles de calidad ni garantía de su correcta manipulación. En muchos casos, estas inyecciones se realizan sin supervisión médica, aumentando el riesgo de infecciones graves o reacciones alérgicas fatales.
El doctor Mena enfatiza que «aquí debe haber un control. El Ministerio de Deportes debe tener acciones para esos dirigentes que cometen eso y el uso exhaustivo de las pruebas de dopaje, hacerlas más rigurosas para evitar que a esos niños les hagan eso.»
Un llamado a la acción
Especialistas urgen a las autoridades a reforzar el control sobre la venta de esteroides veterinarios y a implementar campañas educativas dirigidas a adolescentes y sus familias.
El presidente del Colegio Dominicano de Médicos Veterinarios, doctor Waskar Ariza, consideró que es un crimen aplicarle anabólicos creados para animales a los atletas con el objetivo de lograr mejor rendimiento y mayor masa muscular.
Ariza denunció que en las tiendas veterinarias están vendiendo “sin ninguna receta” todo tipo de medicamentos destinados para obtener mayor masa muscular de los animales, pero son utilizados en jóvenes deportistas, mayormente para aquellos atletas que practican el béisbol.
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